Oviedo, Javier CUARTAS

La compañía británica de transportes terrestres National Express (NX), dueña de la empresa asturiana Alsa, líder en España, recuperó en el primer semestre del año la rentabilidad tras el dificilísimo ejercicio pasado, en el que la compañía había entrado en pérdidas. National Express, cuyo mayor accionista es la familia asturiana Cosmen Menéndez Castañedo, comunicó ayer su voluntad de reanudar a fines de este año el pago de dividendos a los accionistas, de persistir la mejoría en el negocio.

NX obtuvo en los primeros meses de este año un beneficio neto, después de impuestos, de 19,4 millones de libras (23,29 millones de euros) frente a una pérdidas en el mismo período del año precedente de 36,6 millones de libras (43,93 millones de euros al cambio actual).

El grupo británico de autobuses, autocares y ferrocarriles logró esta mejora de sus cuentas pese a un recorte del 26% de su volumen de negocio (los ingresos se situaron en 1.059,6 millones de libras, equivalentes a 1.272 millones de euros). La caída de la facturación obedeció, fundamentalmente, a la pérdida del negocio de los buses urbanos de Londres, que vendió el año pasado para reducir deuda, y a la renuncia a la deficitaria línea ferroviaria de la Coste Este del Reino Unido. La caída de ingresos también se vio inducida por el efecto cambiario: la revalorización de la libra frente al euro y al dólar supuso una devaluación en términos monetarios, una vez expresados en libras, de los ingresos aportados por España y Norteamérica.

En términos homogéneos, la compañía expresó ayer un mantenimiento estable de los ingresos, con un crecimiento en los autobuses urbanos del Reino Unido (único negocio, sin embargo, que no mejoró su margen de beneficio) y la obtención de 1.600 nuevos contratos de transporte escolar en América del Norte.

La mejora de los resultados y el retorno a los beneficios han sido motivados por una mejora de los márgenes operativos en el Reino Unido, América del Norte y España. En la división española se incluye el negocio de Portugal y Marruecos, mercados que también dependen de la filial asturiana Alsa.

La mejora del margen operativo en el conjunto del grupo ha sido de 3,8 puntos porcentuales (un aumento del 73%), con los que el beneficio operativo (95,7 millones de libras) representan el 9% de los ingresos frente al 5,2% de hace un año.

La mejora de los resultados se ha visto impulsada por el recorte de costes (incluido el menor precio del combustible y los efectos de un programa de ahorro), pero también por el progresivo desendeudamiento del grupo. Tras la ampliación de capital que por valor 360 millones de libras acometió NX en noviembre y la cancelación de créditos, la deuda del grupo, que llegó a ser en 2009 uno de sus mayores problemas, se ha reducido el 39%, desde los 977,5 millones de libras a 601,1 millones (721 millones de euros). Además, el grupo ha refinanciado parte de la deuda viva hasta 2014.

Tras la devolución de la deficitaria línea ferroviaria de la Costa Este, NX está en conversaciones con el actual Gobierno liberal-conservador para ampliar sus otras concesiones ferroviarias (C2C y las franquicias de East Anglia) durante un año adicional a partir de su vencimiento en 2011. El anterior Gobierno laborista había amenazado al grupo con no renovarle esas líneas por haber obligado a renacionalizar la ruta ferroviaria de East Coast Main Line.

Dean Finch, presidente ejecutivo de NX, anunció previsiones esperanzadoras para el segundo semestre. Alsa sigue aportando más de un tercio (34,48%) del beneficio de explotación del grupo, aunque menos que un año antes, en parte por el efecto cambiario. Los ingresos de Alsa (303 millones de euros) se redujeron el 4,1%, pero el beneficio operativo se amplió el 17% (39 millones de euros) y el margen de operaciones ganó 2,2 puntos, hasta el 13,1%, cuatro puntos superior al del grupo NX en su conjunto.