Madrid / Oviedo,

Agencias / M. M.

El sector financiero español tendrá que ser mucho más transparente y facilitar más información respecto de sus riesgos y negocios inmobiliarios. Además, los bancos y cajas deberán presentar al Banco de España información adicional trimestral sobre sus cuentas. El subgobernador de la autoridad financiera nacional, Javier Aríztegui, afirmó que «en el momento actual, en que los mercados financieros internacionales muestran su aversión al riesgo y su incomodidad frente a sistemas bancarios muy dependientes de la financiación exterior», el sistema financiero español debe «consolidar los avances» de su transformación y seguir utilizando la transparencia como «principal instrumento para mostrar a los inversores la solidez del sistema».

La Confederación Española de Cajas de Ahorros (CECA) y la Asociación Española de Banca (AEB) ya anunciaron su disposición a asumir las exigencias anunciadas por el Banco de España.

Las dudas sobre la valoración de los activos inmobiliarios del sistema financiero provocaron esta semana enormes pérdidas en la cotización de los cinco grandes bancos españoles, que arrastraron a la Bolsa, provocando su peor semana en casi siete meses, al caer el 7,05%. Las pérdidas acumuladas en lo que va de año ascienden al 20,04%.

El acoso a la banca española también se explica por el temor a que Portugal tenga que solicitar ayuda internacional, como acaba de hacer Irlanda. Según el Banco Internacional de Pagos de Basilea (BIS), la exposición de la banca española a Portugal asciende a 58.700 millones de euros a cierre del segundo trimestre de este año, el 38% del conjunto de la exposición de las entidades financieras europeas.