El Gobierno cumplirá con el compromiso de déficit público del 9,3% del PIB en 2010, que incluso puede ser una décima menor, gracias a la reducción del saldo negativo estatal, que se situó en el 5,1 % y que compensará el mayor registro deficitario de las comunidades autónomas.

El déficit del Estado, ocho décimas menor de lo previsto por el Ejecutivo, se situó en 2010 en 53.444 millones de euros y se redujo cerca del 46% respecto a 2009, cuando sumó 99.785 millones, lo que además supone 4,2 puntos menos del PIB.

La vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Economía y Hacienda, Elena Salgado, destacó, en rueda de prensa, que este déficit del 5,1% es menor del 5,9% previsto si se incluye el efecto de las liquidaciones de las administraciones territoriales, y 1,6 puntos inferior al 6,7% estimado al no contemplar dichas devoluciones.

Salgado, aseguró que esta disminución del déficit estatal en 8.000 millones de euros supone un "colchón" que cubrirá "potenciales desviaciones en alguna otra administración".

En este sentido, dijo, tras apagar su micrófono, que tenía "la impresión" de que el déficit del conjunto de las administraciones públicas (Estado, comunidades autónomas, ayuntamientos y Seguridad Social) se situará en el 9,2% en 2010, una décima inferior a lo pronosticado por el Ejecutivo.

Antes de facilitar este dato aseveró que el Ejecutivo cumplirá "con un margen más que suficiente y con holgura" el objetivo de déficit público del 9,3 % del PIB para 2010.

Explicó que la reducción del déficit estatal se debió fundamentalmente al aumento del 46 % de los ingresos procedentes del IVA, así como a los provenientes por las medidas de consolidación fiscal.

Así, este déficit fue resultado de unos ingresos no financieros del Estado por valor de 127.338 millones de euros (descontada la parte correspondiente a las administraciones territoriales), en torno al 5% más, frente a unos gastos de unos 175.513 millones de euros, el 2,1% menos que en 2009.

Esta evolución positiva se debió al comportamiento de los ingresos vía impuestos, que en términos globales, antes de la cesión a las entidades territoriales, crecieron un 10,9 % frente al 8,1 % previsto inicialmente.

Los gastos del Estado, en opinión de Salgado, se comportaron según lo pronosticado y confirman el cumplimiento de las medidas adicionales de austeridad ejecutadas por el Gobierno, especialmente los acuerdos de no disponibilidad aprobados en enero y mayo, que recogían la no ejecución de partidas presupuestarias por valor de 7.425 millones de euros.

Salgado recordó que estos datos son provisionales, si bien destacó que "no es previsible que se produzcan variaciones relevantes" cuando a finales de febrero se conozcan con mayor precisión estas cifras.

Sobre el déficit fijado para las comunidades autónomas en el 3,1% para 2010, Salgado fue tajante al aseverar que el Ejecutivo ha puesto "las normas claras" y reiteró que aquellas que sobrepasen el déficit estimado deberán presentar un plan de reequilibrio que "sea suficiente" para el Ejecutivo.

Recordó que el Gobierno antes de autorizar emisiones de deuda de las comunidades autónomas les exigirá ese plan de viabilidad y será después cuando actúe "lo más ágil posible" para ayudarlas a disminuir el endeudamiento de forma gradual.

Salgado añadió que lo que tiene que hacer el Gobierno es continuar con las reformas estructurales para mejorar la competitividad de la economía, que "serán las que sigan apuntalando el crecimiento".