Oviedo, J. CUARTAS
El banco participado por Cajastur, CAM, Caja Extremadura y Caja Cantabria tiene concedidos préstamos a la promoción y construcción inmobiliaria por 23.286 millones (de los que el 86% posee garantía hipotecaria), que equivalen al 18% de sus activos totales y al 25,87% de su cartera crediticia. De ese volumen de riesgo contraído con el sector de la edificación, el grupo estima que, aplicando «criterios de máximo rigor», podrían ser créditos de dudoso cobro el 22,4%: 5.216 millones. Sin embargo, la entidad afirma que ese riesgo potencial lo tiene cubierto y con creces (112%) mediante garantías, provisiones y dotaciones. Para los llamados créditos «subestándar» (que podrían llegar a ser dudosos) la cobertura es del 90%.
El grupo tiene contraídos otros 37.000 millones (41% del total de sus préstamos) con hogares para la adquisición de vivienda (con una morosidad baja, del 2,4%) y otros 30.000 millones con particulares (crédito de consumo) y financiación a empresas ajenas a la construcción. Estas cifras no incluyen que el banco CCM, filial de Cajastur, tiene cubierto por el Fondo de Garantía de Depósitos el 100% de su cartera problemática.
Más del 75% de los activos que ha tenido que adjudicarse el grupo por impagos (3.026 millones) corresponden a vivienda terminada y proceden de la alicantina CAM. Este volumen se redujo el año pasado en 800 millones por la venta de bienes que habían sido ejecutados.
Este grupo financiero, el quinto más importante del país, contaba al cierre de 2010 con una ratio de «core capital» (capital de máxima calidad) superior al 8% y una solvencia que rebasa el 12%, una vez contabilizado ya en 2010 el coste total (más de 350 millones) de sus prejubilaciones para el trienio 2011-2013.
La financiación del grupo procede en un 35% de los mercados mayoristas y de forma diversificada. El grupo tiene una liquidez disponible de 12.295 millones y capacidad de emisión para captar otros 13.067 millones de euros.
