Washington / Fráncfort

El Fondo Monetario Internacional (FMI) considera que España es el mejor ejemplo de un país que va en la dirección correcta, pero alerta de que aumenta el fantasma de «una generación perdida» por el elevado desempleo juvenil.

El director del departamento de Europa del FMI, Antonio Borges, dijo que «España se mueve hacia un modelo de crecimiento más sostenible, no tan basado en el sector inmobiliario, sino en exportaciones y el comercio, y esto es crucial para el futuro de España y el empleo a largo plazo».

Pero en su último informe sobre Europa, el FMI sostiene que España se enfrenta al creciente riesgo de una «generación perdida» por el elevado desempleo juvenil: casi la mitad de los menores de 25 años se encuentra en paro.

Pero Borges afirmó que la política económica española dará resultado («es cuestión de tiempo») y que la situación de su sector bancario es «sólida».

El estudio del FMI es particularmente duro con la tasa de paro de España, que atribuye, como en el caso de Irlanda, a aquellos países en los que en los años anteriores a la crisis se produjo un exceso de edificación: el «sector de la construcción se contrajo con fuerza después del estallido de la burbuja inmobiliaria, dejando a muchos trabajadores poco cualificados sin empleo». El FMI sostiene, además, que España estaría hoy con un crecimiento superior de no estar aplicando políticas de ajuste exigidas por los mercados: el Fondo prevé que las medidas de ahorro resten 2,2 puntos al PIB este año y 1,5 puntos en 2012.