ESEN es una empresa de Ingeniería y Servicios Energéticos orientada a diseñar e implantar proyectos de ahorro energético para sus clientes. En sus propuestas integra tecnologías de eficiencia, renovables así como el diseño del proyecto de financiación sobre la base de los ahorros logrados.

1. ¿Qué les impulsó a constituir ESEN en el momento de mayor intensidad de la actual crisis económica europea?

Estamos inmersos en una profunda crisis económica en un contexto de recursos limitados y cada vez más caros, que nos exige maximizar la eficiencia en el uso de los mismos. La energía es uno de esos recursos, cuyo consumo es indispensable en nuestra actividad diaria. Dado que contribuimos a reducir el coste económico y ambiental del consumo energético, la crisis en todo caso incrementa más aún esta necesidad.

2. Además de como ingeniería energética, se definen como empresa de servicios energéticos, ¿Qué implican ambos términos?

Como ingeniería nuestro cometido acaba en el proyecto que define los equipos y las medidas adecuadas para maximizar la eficiencia en el consumo de la energía, es decir, para satisfacer una necesidad existente con la menor cantidad posible de energía primaria y con el menor coste global.

Como empresa de servicios energéticos, o ESE, perseguimos proporcionar un servicio energético integral y, por tanto, no sólo la determinación de las medidas a implementar, sino también su financiación y ejecución, al igual que el mantenimiento de las instalaciones e incluso, el suministro del combustible.

3. Dado que ESEN es, por tanto, una empresa de servicios energéticos, ¿Tienen resuelto el problema de la financiación de sus proyectos a pesar de la crítica situación crediticia europea?

En efecto, si las medidas de ahorro y eficiencia provocan una reducción sensible de costes y el cliente puede mantener un cierto nivel de actividad, el proyecto resulta entonces rentable y técnicamente seguro, lo que a su vez conlleva que podamos financiarlo.

Para la financiación de nuestros proyectos contamos, además de con los recursos propios, con los recursos gestionados por diversos fondos de inversión, incluidos capital riesgo, cada uno de ellos focalizado en distintas configuraciones de proyecto. Lo que no deja de mostrar el gran interés que para los mercados financieros tiene el sector de la eficiencia energética.

Contamos igualmente con líneas de financiación de organismos públicos especializados como IDAE; además de dispones de líneas específicamente diseñadas para la financiación a las Administraciones Públicas.

4. ¿Cómo ingeniería energética, qué rango de servicios ofrecen?

Disponemos de todos los equipos necesarios (analizadores de redes, cámaras termográficas, analizadores de gases, caudalímetros de ultrasonidos,…) para realizar evaluaciones de eficiencia en todo tipo de equipo o sistema energético, por lo que abarcamos desde la consultoría más sencilla hasta el proyecto de cogeneración más innovador pasando por la auditoría energética más minuciosa y compleja. Adicionalmente implantamos sistemas de gestión energética según la nueva norma ISO 50001, que supone un marco idóneo para que las empresas incorporen en su gestión la cultura del uso racional de la energía y planifiquen la mejora continua de la eficiencia energética mediante la implantación progresiva de medidas.

5. El objetivo prioritario de la ingeniería energética es la maximización de la eficiencia en el consumo de energía, pero ¿son realmente eficaces las auditorías energéticas?

Las auditorías energéticas son indispensables para poder determinar las medidas de ahorro y eficiencia más adecuadas, pero para que resulten eficaces tienen que estar realizadas bajo la modalidad de "prestaciones garantizadas". Suponen tales auditorías el comienzo ideal de la hoja de ruta de un proyecto de ahorro energético.

ESEN garantiza a sus clientes los ahorros que determina en sus auditorías, incluyendo cláusulas de compensación económica al cliente en el caso de que no se alcancen los ahorros previstos, por causa de error propio.

6. ¿Cómo es posible que una empresa sepa si le merece la pena encargar una auditoría energética?

Una empresa correctamente gestionada siempre sabe qué equipos y etapas de su proceso productivo son susceptibles de modificaciones a fin de incrementar su eficiencia energética, pero necesita la auditoría para tener cuantificados la ineficiencia y los ahorros posibles. En todo caso, la empresa sabe lo gasta en energía, si consideramos que en general existen ahorros potenciales del 10% al 40%, les resultará fácil valorar la utilidad de una auditoría.

En todo caso, ESEN sólo acepta realizar una auditoría energética cuando tras analizar los datos de consumo aportados por la empresa y lo observado durante las primeras inspecciones, resulta sobradamente segura la existencia de ahorros apreciables para el cliente, sea éste una empresa industrial o una comunidad de propietarios.

7. ¿Cómo puede estar seguro un empresario de que su factura energética se va a reducir en la medida que ESEN le indica?

Obviamente no podrá tenerlo acreditado antes de acometer las instalaciones y medir los consumos, pero si podrá tener un aval o una serie de avales que podrá ejecutar en caso de que los costes unitarios resultantes sean superiores a los contractuales.

8. ¿Cuáles son las medidas más eficaces para reducir el coste energético en un edificio sea éste de viviendas u oficinas, o un hotel, hospital o geriátrico?

Como podrá suponer no existe una regla única para todos los edificios, pues las instalaciones energéticas de que disponen son muy diferentes, al igual que son diferentes sus niveles de aislamiento térmico. No obstante, la relación de medidas disponibles es muy amplia y comprende no sólo la típica renovación de calderas antiguas, sistemas de climatización e iluminación, todos ellos aspectos de máxima relevancia, sino también la regulación de la instalación, la sectorización climática de la red de distribución y de iluminación, la instalación de llaves termostáticas, la instalación de paneles solares térmicos, aunque en Asturias están mejor indicados los tubos de vacío, la mejora del aislamiento térmico mediante la renovación de ventanas y fachadas, la instalación de un sistema de cogeneración, la conexión del edificio a una red de calor, etc.

9. ¿Es realmente posible renovar una sala de calderas de un edificio de viviendas o de un geriátrico, o de un hotel y que los propietarios paguen menos que antes por el calor?

Naturalmente que es posible, y tanto más grandes son los ahorros cuanto más ineficiente es la instalación actual, más grande es el edificio y más caro el combustible que consume.

A título de ejemplo podemos indicarle que una comunidad de 200 vecinos que tenga una instalación centralizada de calefacción y ACS que consuma gasóleo ahorraría unos 60.000€ al año durante los 10 años que duraría el contrato de servicio energético.

10. ¿Existen subvenciones para una comunidad de propietarios que decide cambiar la caldera?

Cuando una comunidad de propietarios acomete la renovación del sistema centralizado de calor en modalidad de contrato de servicio energético no precisa subvención alguna para reducir su factura energética.

No obstante, solicitamos adicionalmente la correspondiente subvención, entre un 22 y un 40%, y pactamos con la comunidad la forma en la que le interesa recibirla.

11. ¿En qué casos resulta adecuada la instalación de un sistema de cogeneración?

Nuevamente no existe una regla única, pero el propio principio de la cogeneración nos define la línea directriz. Debe existir un consumo de calor anual mínimo y, sobre todo, constante y continuado en el tiempo.

Estas condiciones se dan en ciertas industrias, como las alimentarias, en grandes residencias geriátricas, hoteles y edificios residenciales, en complejos deportivos que dispongan de piscina climatizada, también en algunos parques industriales, etc.

12. Ahora que lo menciona, los parques industriales parecen, a primera vista, adecuados para disponer de una red de calor, ¿es así?

Desgraciadamente, ninguno de los actuales parques o polígonos industriales asturianos, y prácticamente ninguno de España, fue, ni siquiera, diseñado para ser dotado de una red de calor, por lo que aún hoy, a pesar del tremendo avance tecnológico, no resulta económicamente viable instalarla en todos ellos.

No obstante, ESEN tiene elaborado un proyecto que estamos presentando a las asociaciones sectoriales a fin de determinar en qué parques industriales asturianos resulta viable la instalación de una red de calor.

Por otra parte tenemos constancia de que el polígono industrial que HUNOSA promueve en los terrenos del antiguo lavadero de Modesta en Sama, es el primero en contemplar una red de distribución de calor en su proyecto de urbanización.

13. ¿Qué otras medidas proponen para reducir la factura energética de las industrias?

La primera medida ha de ser siempre e inexorablemente la realización de una auditoría energética. Ahora bien, como anteriormente remarcamos, tal auditoría debe incluir una fase de análisis y evaluación minuciosos en la que se efectúe una completa campaña de mediciones y una garantía de prestaciones relativa a las medidas propuestas.

La renegociación de la aplicación de las tarifas eléctricas, la contratación de suministro eléctrico a mayores tensiones allí dónde sea factible, la concentración de las facturaciones de combustible, la renegociación de los correspondientes precios y el aprovechamiento de los gases calientes y otros calores residuales, son también actuaciones muy convenientes.

14. ¿De qué formas pueden aprovecharse esos gases calientes residuales industriales a los que acaba de referirse?

Una de las formas es mediante el intercambio del calor de los gases con agua y su aportación a una red de calor. El aprovechamiento térmico de los eventuales gases calientes residuales es, frecuentemente, la medida de impacto más relevante. Ya que una vez que todo el calor generado en el proceso productivo se reaprovecha en el mismo, queda estudiar cómo vender el sobrante, y en esa tarea podemos ser de gran ayuda, máxime si la industria excedentaria se encuentra entre consumidores térmicos próximos.

15. ¿Existen ayudas públicas suficientes para que las industrias puedan reducir sus costes energéticos?

Las empresas siempre nos quejaremos de la insuficiencia de las ayudas públicas, pero cuando podemos aumentar nuestra competitividad reduciendo los costes energéticos no debemos condicionar la ejecución de las medidas de ahorro a la percepción de una ayuda.

Actualmente las ayudas públicas llegan a cubrir el 75% del coste de una auditoría energética, pero, ésta debe acometerse aunque la ayuda fuera mucho menor o nula. Para la ejecución de las medidas, pueden llegar hasta el 30%.

16. El precio del gasóleo de automoción está superando al de la gasolina, ¿Qué se puede hacer para reducir su impacto económico?

La Unión Europea y el Ministerio de Industria tienen aperturados programas específicos de ayuda para la renovación de flotas y la implementación de sistemas de recuperación de energía.

En una empresa en la que el componente logístico por carretera sea relevante, podemos estudiar integradamente la aplicación de estas medidas, conjuntamente con las correspondientes al resto de los consumos energía.

17. Todos sabemos que muchos ayuntamientos apenas tienen dinero para pagar la corriente eléctrica, ¿En qué les puede ayudar la ingeniería energética?

Una parte importante de la factura energética en los ayuntamientos. Es frecuente que los ayuntamientos dispongan de recursos energéticos ociosos: masas forestales, fangos de depuradora, residuos de mataderos y de industrias agroalimentarias, etc. Por tanto, uno de los trabajos prioritarios consistirá en estudiar los rendimientos que puede proporcionar la valorización energética de todos esos recursos.

18. ¿En qué casos son adecuadas las redes de calor?

En todos los lugares en los que se concentre una elevada y constante demanda térmica satisfecha por medio de diversas instalaciones térmicas inconexas. Las redes de calor distritales tanto públicas, como privadas y mixtas, que es prioritaria en la estrategia energética europea, puede adicionalmente ayudar, no sólo a la reducción de la factura energética de los ayuntamientos sino al incremento de sus ingresos por tasas derivadas del uso de las vías públicas por la red de distribución del calor.

19. ¿Consideran pues posible reducir el coste actual de la depuración de las aguas residuales en Asturias?

Por descontado, el aprovechamiento energético de los lodos de las depuradoras tiene muchos años de historia y en Asturias en particular estamos muy lejos de aprovecharlos integralmente.

Hoy es posible extraer todo el biogás que contienen por medio de pequeños digestores anaerobios de gran rendimiento, posibilitando así, tanto su completa eliminación como la generación simultánea de calor y corriente eléctrica.

20. ¿En qué sectores y qué tipo de acciones hemos de desarrollar en Asturias para reducir nuestra factura energética?

Está claro que lo primero que tenemos que hacer es planteárnoslo con total y absoluta sinceridad, para, acto seguido, implicar a todos los sectores productivos y, en general, a todos los consumidores en las tareas de 1º detección de todas las ineficiencias, 2º reconocimiento de todos los recursos energéticos ociosos y 3º elaboración consensuada y dotada de fondos públicos y privados de un plan energético para un plazo no inferior a 10 años.

En todo caso, la utilización de la biomasa forestal, el biogás, tanto canalizado como en células, la geotermia y la energía solar térmica, mediante los tubos de vacío con preferencia a los paneles solares, y la generalización de la implantación de sistemas de cogeneración, son tecnologías que habrán de contribuir a disminuir la factura energética asturiana.