Oviedo / Lisboa,

Agencias / L. G.

China Three Gorges Corporation, uno de los gigantes asiáticos de la energía, se convertirá en el primer accionista de Energías de Portugal (EDP), compañía propietaria de la asturiana Hidrocantábrico (HC Energía). El Gobierno luso eligió ayer la oferta china como ganadora del proceso de privatización del 21,35% del capital de EDP, en detrimento de la alemana E.On, el otro gran aspirante. Lisboa se embolsará con la operación 2.693 millones de euros y recaba el compromiso de Pekín de aportar ayuda financiera para EDP y de realizar otras inversiones en el país.

Ganó el dinero emergente de China. El Consejo de Ministros luso, presidido por el conservador Pedro Passos Coelho, ha seleccionado la oferta económica más elevada entre las cuatro que había recibido para la privatización de la mayor parte del capital que el Estado conserva en EDP. La oferta asiática implica el pago de 3,45 euros por acción, lo que supone una prima del 53,6% respecto a la cotización que EDP tuvo ayer en la Bolsa de Lisboa. Portugal ingresará de ese modo 2.693 millones con la privatización. Los demás competidores ofrecían precios más bajos. La alemana E.On se había quedado en 3,25 euros por título, por debajo de la propuesta brasileña de Eletrobras (3,28 euros). La también brasileña y pública Cemig hizo la oferta más modesta.

Según la comunicación que la sociedad estatal Parpública (titular de las acciones que se privatizan) remitió al organismo supervisor de la Bolsa lisboeta, la oferta de la Three Gorges Corporation es la que mejor se adapta a las condiciones fijadas en el cuaderno de venta. La privatización del 21,35% de EDP formó parte de los compromisos adquiridos por Portugal para recibir el rescate financiero de la Unión Europea (UE) y del Fondo Monetario Internacional (FMI) que el país solicitó en abril de este año. Las dificultades económicas amplificaban la importancia de los ingresos que Lisboa pudiera obtener con la privatización. Pero el Ejecutivo ha tenido en cuenta también las propuestas de los aspirantes para el crecimiento industrial de EDP y sus propósitos para el Gobierno de una sociedad que es la compañía cotizada más importante del país. EDP controla el negocio eléctrico en Portugal y tiene posiciones relevantes en España (a través de Hidrocantábrico) y en Brasil y posee uno de los grupos de energías verdes (EDP Renovables, con sede en Oviedo) más potentes del mundo, con posiciones notables en EE UU.

Los datos que trascendieron ayer indican que el Consejo de Ministros tuvo muy en cuenta, además del precio, la oferta china para respaldar el crecimiento de EDP. Three Gorges Corporation ha brindado líneas de apoyo financiero por valor de hasta 4.000 millones de euros para que el grupo energético pueda reducir su deuda. El endeudamiento de EDP ronda ahora los 16.500 millones de euros.

El comprador chino, asesorado en la operación por Credite Suisse, también se ha comprometido a inyectar otros 2.000 millones mediante la toma de participaciones minoritarias en parques eólicos de EDP. Three Gorges es un gigante de la generación hidroeléctrica -el complejo de las Tres Gargantas, en el río Yangtse, es el mayor del mundo- y tiene intereses en centrales nucleares, pero ha hecho también una apuesta estratégica por la energía del viento. En total, el compromiso económico de China supera los 8.000 millones, destacó el Gobierno. «Es la oferta más fuerte en términos globales», expuso un portavoz. Pekín ha añadido la promesa de más inversiones en Portugal a través de sus bancos.

China también ha dado a entender que, como nuevo accionista de referencia, avalará a la actual dirección, encabezada por Antonio Mexia. Tal posición pudiera indicar que Three Gorges buscará el entendimiento con los otros socios que hasta ahora formaban el núcleo duro de EDP, entre los que se encuentra Cajastur, tercer accionista privado con el 5% del capital. El consejo supervisor de EDP, en el que está representada la caja asturiana, había emitido un informe favorable a las ofertas de Three Gorges y también a la de E.On. Las brasileñas y públicas Eletrobras y Cemig obtuvieron peor consideración en ese informe y llegaron con las posibilidades menguadas a la reunión del Consejo de Ministros. E.On, en cambio, entró en la recta final del proceso emparejada con Three Gorges y con el apoyo político de la canciller alemana, Angela Merkel, que intervino ante Passos Coelho en defensa de la oferta alemana.

E.On es la gran perdedora del pulso por EDP, como lo fue también en España cuando en 2006 fracasó en su intento de comprar Endesa. «No pudimos ofrecer más», señaló un portavoz de la compañía germana, que ha sucumbido al poderío económico chino, capaz de presentar una oferta que supera en casi 500 millones el nivel mínimo de ingresos que esperaba Portugal y que supone pagar por el 21,35% de EDP un 50% más del valor bursátil de esa participación. La de Three Gorges es la mayor inversión realizada por una empresa energética china fuera de su país. Es también la primera gran operación que el gigante asiático hace en el negocio europeo de la energía.