Oviedo, L. G.
La reforma financiera aprobada ayer por el Consejo de Ministros tendrá como efecto colateral, a decir del Gobierno, un abaratamiento de los pisos. Los expertos creen que a escala nacional puede, efectivamente, acelerarse el ajuste de los precios, pero no tanto en Asturias. El Colegio Oficial de Agentes de la Propiedad Inmobiliaria considera que la reforma tendrá un impacto «muy limitado» en el mercado asturiano de la vivienda, porque la cantidad y la calidad de las casas que bancos y cajas de ahorros tienen a la venta son mucho más modestas que en otras comunidades autónomas.
La teoría general sobre el presumible reflejo en la vivienda de la reordenación financiera es la siguiente: la exigencia de reservar más dinero (provisiones) para cubrir los riesgos derivados de los activos inmobiliarios (entre ellos, las casas acumuladas por impagos) estimulará a los bancos a bajar los precios para deshacerse de sus pisos y, al mismo tiempo, les permitirá vender con mayores descuentos sin incurrir en pérdidas en sus balances.
«Se ha dicho que la reforma tendrá dos efectos: abaratar el precio de la vivienda y abrir el grifo del crédito; es probable que el primero se cumpla; el segundo, no», opinó para este diario José García Montalvo, catedrático de Economía de la Universidad Pompeu Fabra de Barcelona. Según este experto, la reforma auspiciada por el ministro de Economía, Luis de Guindos, transita por caminos análogos a los intentos precedentes de los gobiernos de José Luis Rodríguez Zapatero, sin resolver los problemas de raíz. García Montalvo sí ve posible que la banca intensifique los descuentos en los pisos que tiene a la venta y que eso arrastre al conjunto del mercado español. Ahora bien, precisan los especialistas, está por ver si los propios bancos dispondrán de liquidez para abrir más la mano del crédito al vender sus propios pisos y si los hogares están en disposición de hacer frente a las condiciones que el sector está aplicando a los préstamos.
No existen datos precisos sobre las viviendas que bancos y cajas poseen en Asturias como consecuencia de embargos a particulares o de impagos de promotores. Según una aproximación basada en información de las principales entidades y de sus portales inmobiliarios en internet, el número de pisos y casas que el sector financiero tiene a la venta puede superar los 700. En todo el país, la banca oferta en sus páginas web 86.000 inmuebles.
«La banca tiene un "stock" pequeño en Asturias, y con frecuencia se trata de viviendas antiguas y situadas en zonas periféricas», sostiene Antonio Vega, presidente del Colegio de Agentes de la Propiedad Inmobiliaria. Vega añade que, por ello, sería «muy limitado» el impacto en el mercado de una rebaja de precios en los pisos de las entidades financieras. «Esto no es el Levante», apostilla el directivo. La mayor concentración de inmuebles -viviendas o solares- que han acabado en los balances de bancos y cajas de ahorros se produce en la costa mediterránea y en otras regiones donde el «boom» de la edificación fue más intenso y donde también lo es la morosidad. Asturias no está entre esas comunidades, aunque las inmobiliarias no descartan que la reforma financiera traiga rebajas en viviendas turísticas que están sin vender en el litoral asturiano.
