Oviedo / Madrid,

J. CUARTAS / Efe

La caja aragonesa Ibercaja, que anteayer anunció su unión con Caja 3 (resultado de la fusión de Caja Inmaculada, de Zaragoza; Cajacírculo, de Burgos, y Caja Badajoz), mantiene su aspiración a pujar por la catalana Unnim, uno de los tres grupos de cajas intervenidos por el Estado y pendientes de reprivatización. Ibercaja, que hasta ahora era una de las tres únicas cajas (junto con las ínfimas Ontiyent y Pollença) que no había emprendido ninguna operación de concentración, se dispone así a dar un salto en el «ranking» financiero.

La anexión de Caja 3 (la menor de las fusiones españolas de cajas) por Ibercaja permitirá a este grupo aumentar su tamaño el 44%. Con ello, el grupo resultante tendrá dos años, y no sólo uno, para cumplir con las provisiones impuestas en febrero por el Gobierno. Además, Ibercaja y Caja 3 logran rebasar en tamaño a Bankinter y a Liberbank.

El nuevo grupo de Ibercaja y Caja 3 sólo tiene cinco oficinas en Asturias: tres de Ibercaja y dos de Caja Badajoz. Pero Ibercaja participa indirectamente en Duro Felguera (es accionista del banco EBN, dueño del 6,18% del grupo asturiano) y Caja 3 es copropietario de los supermercados El Árbol, con origen y gran implantación en Asturias, por dos vías: a través de Caja Círculo y de Caja Inmaculada.