Madrid, Agencias

La agencia de calificación Standard & Poor's rebajó anoche en dos escalones la nota que le otorga a la deuda soberana de España hasta situarla en «BBB+» o aprobado alto, con perspectiva negativa, decisión que atribuyó al volumen de deuda del país mientras su economía se contrae. «Pensamos que los peligros están aumentando en relación a su situación fiscal y a su flexibilidad, así como a la carga de su deuda soberana», aseguró la calificadora en un comunicado. La anterior calificación de España estaba en el nivel «A», equivalente a un notable.

La Bolsa española volvió a cerrar ayer en rojo tras dos jornadas consecutivas de beneficios. El Ibex-35 se dejó ayer el 1,29%, aunque logró mantener los 7.000 puntos. El Banco Santander (-3,38%), que ganó en el primer trimestre un 24% menos, y los castigos a las constructoras, fundamentalmente Sacyr (-8,21%) y ACS (-6,25%), que vendió el 10% de Abertis, están entre las causas de las pérdidas.

A todo ello se sumó el impacto del último informe del Fondo Monetario Internacional (FMI), en el que se recomendaba inyectar más dinero público para sanear la banca española. La prima de riesgo, que el miércoles llegó a bajar de los 400 puntos básicos, volvió a remontar, para situarse al cierre de los mercados en 414 puntos, nueve más que en la jornada anterior.

El banco inglés Barclays consideró ayer que separar los activos ligados al «ladrillo» de los balances de las entidades financieras, como están estudiando el Gobierno y el Banco de España, sería «razonable» para mejorar la transparencia del sector y limitar sus pérdidas.