Avilés, José Luis SALINAS
Los sindicatos asturianos alertaron ayer, durante la celebración del Primero de Mayo en Avilés, sobre la delicada situación en la que se encuentra la industria regional. Los secretarios general de UGT, Justo Rodríguez Braga; CC OO, Antonio Pino; y USO, Francisco Baragaño, aseguraron en sus discursos, en la plaza del Ayuntamiento avilesino, que urge buscar ya una solución a los costes energéticos que está penalizando a las principales multinacionales asentadas en el Principado, a la subida de las tasas portuarias y a las nuevas dificultades en la minería y las fábricas de armas de Oviedo. Según los líderes sindicales, «la columna vertebral de la industria regional está tocada».
La marcha del Día del Trabajo reunió a miles de personas -más de 40.000 según estimaciones sindicales- en la que es la quinta manifestación convocada por los sindicatos desde el mes de febrero. Las críticas de los manifestantes se centraron en el plan de recortes que viene aplicando el Gobierno central, pero también en la situación regional.
Antonio Pino aseguró que «la industria asturiana está en una situación muy peligrosa». El sindicalista citó a Arcelor-Mittal, Alcoa y a la Fábrica de Armas de la Vega como los centros que a día de hoy corren mayor riesgo en el Principado. Y denunció que parte de la culpa de esta situación «la tiene el Gobierno en funciones de Francisco Álvarez-Cascos, que no ha hecho nada por defender a nuestra industria». Según aseguró Pino, el Ejecutivo asturiano, ahora en funciones, «es tan ineficiente que tiene más de 6.000 expedientes del salario social básico bloqueados».
En la misma línea se expresó Rodríguez Braga. El líder regional de UGT señaló que «en Asturias necesitamos ya un Gobierno fuerte que plante cara a Madrid y negocie el futuro de la tarifa eléctrica y el del puerto de El Musel, que se encuentra casi intervenido». «La columna vertebral de la región, Alcoa y Arcelor-Mittal, está en grave peligro, y encima ahora quieren hacer como Margaret Thatcher y acabar también con todo el sector minero». El dirigente ugetista reveló que los sindicatos han pedido una reunión con la patronal FADE para abordar la situación de la industria.
Los sindicatos aseguraron que mientras que el Gobierno no rectifique en sus políticas de ajuste y no dé marcha atrás con la reforma laboral, ellos no cesarán sus movilizaciones. «Estamos en plena forma y cuanto más nos agredan más nos vamos a movilizar», aseguró Rodríguez Braga. El líder de USO, Francisco Baragaño, criticó que «la crisis está provocando unos intolerables y pavorosos efectos, y nos seguiremos movilizando hasta hacerles rectificar».
Durante la marcha, la mayor parte de los cánticos fueron para pedir la convocatoria de nuevos paros. «Es hora ya de una huelga general», coreaban en algunas partes de la larga cola de la manifestación que recorrió las calles de Avilés. La consigna la lanzaban especialmente los más jóvenes del grupo. De hecho, la pancarta que cerraba la marcha sindical era la de un gigantesco cartel en el que se leía: «¡Huelga general ya!». En el otro extremo, la primera de las pancartas de la manifestación, la que sostenían los líderes sindicales de la región, rezaba: «Trabajo, dignidad, derechos».
También se comentaba el elevado número de participantes en la marcha. «Somos tantos que hemos colapsado Avilés», gritaba un joven a través de un megáfono a mitad del largo pelotón cerca del estadio municipal Nuevo Ramón Suárez Puerta. Para a continuación vociferar: «De nuestro dinero, ni un duro para el clero». Un lema que muchos de los presentes corean, al igual que el que llegó a continuación: «Esta reforma la vamos a parar».
La concentración final se cerró con todo el público congregado en la plaza de Avilés cantando al unísono el himno de Asturias. Un grupo de jóvenes entonó después «La Internacional».
En la marcha, como viene siendo habitual en los últimos actos, también participaron los representantes de IU (el coordinador general de la coalición en Asturias , Jesús Iglesias, y el diputado nacional Gaspar Llamazares) y el secretario de Organización de la Federación Socialista Asturiana (FSA), Jesús Gutiérrez, además de la alcaldesa de la ciudad, Pilar Valera.
En Gijón, los sindicatos minoritarios -Suatea, CSI y CGT- celebraron una manifestación alternativa en la que participaron unas dos mil personas y durante la que se oyeron llamamientos a una nueva huelga general.
«Necesitamos sin más demora un Gobierno regional fuerte que plante cara a Madrid para defender la industria»
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Secretario general de UGT
«El Gobierno regional es tan ineficiente que ahora mismo tiene parados más de 6.000 expedientes del salario social básico»
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Secretario general de CC OO
«La crisis tiene unos efectos pavorosos e intolerables. Nos seguiremos movilizando hasta hacerles rectificar»
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Secretario general de USO
