Oviedo

Juan Carlos Torres Inclán recibió una indemnización de 3,625 millones de euros tras su salida de la presidencia de Duro Felguera en junio de 2011. Según consta en el informe de gobierno corporativo de la compañía, hasta el pasado año los presidentes de Duro disponían de un blindaje que les daba derecho a cobrar el equivalente a cuatro anualidades del salario, siempre que el cese no fuera consecuencia de un incumplimiento imputable al directivo, y una quinta anualidad como compensación por el compromiso de no competir con la empresa durante un período de dos años. Torres Inclán alegó motivos personales para dejar la presidencia de Duro después de 21 años, si bien esa decisión se produjo tras un período en el que afloraron diferencias con el entonces consejero delegado y hoy presidente, Ángel Antonio del Valle. El derecho a indemnización en caso de cese del primer ejecutivo fue suprimido en julio de 2011.