Madrid, Agencias

El Tribunal Supremo ha aceptado las medidas cautelares solicitadas por Endesa e Iberdrola en sendos recursos en contra de la congelación de la tarifa de la luz y ha establecido que el Gobierno facture lo no cobrado a 29 millones de consumidores desde octubre de 2011. Sobre el papel, el auto judicial puede traducirse en una subida extra de la luz del 6%, si bien el Gobierno aún no se ha pronunciado y podría demorar la aplicación de la resolución.

La factura de la luz (tarifa de último recurso, TUR) se divide en dos partes: una es la subasta trimestral de empresas comercializadoras de energía, que depende de la evolución del mercado y sus costes; otra es el peaje establecido por el Gobierno para retribuir los costes del sistema. El Supremo suspendió el 22 de diciembre la bajada del 12% de los peajes eléctricos aprobada por el Ministerio de Industria, que ahora dirige José Manuel Soria, en octubre. Aunque la resolución valía entonces sólo a partir de la última semana de 2012, Iberdrola recurrió y el alto tribunal le ha dado la razón en que la TUR debe volver a calcularse para el conjunto del cuarto trimestre de 2011.

Presumiblemente, las eléctricas tendrán que refacturar tres meses enteros de luz a los clientes, lo que, a la vista de que los peajes tienen un peso del 50% sobre el recibo, supone una presión al alza del 6% que los clientes no han pagado y deberían pagar ahora. No obstante, la aplicación de esta subida está a expensas de nuevos informes que debe emitir Industria.

En otro de los autos, el Supremo se suma a las tesis ya defendidas anteriormente por el tribunal y considera insuficiente el aumento de peajes del 10% en enero, con el que el Gobierno forzó una congelación de la tarifa de último recurso después de que el coste de la energía bajara en parecida proporción.