Bucarest, Agencias

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, reclamó ayer, en presencia de la canciller alemana, Angela Merkel, el cumplimiento de los acuerdos alcanzados en el Consejo Europeo del pasado mes de junio para avanzar en la integración europea. Durante el congreso del Partido Popular Europeo (PPE) que se celebra en Bucarest (Rumanía), Rajoy subrayó que es el momento de «estar a la altura de las circunstancias» y no dar «bandazos» porque cualquier «señal de debilidad» pone «peligrosamente en riesgo» la credibilidad y estabilidad europea.

España aspira a que se agilice la unión bancaria, clave para evitar que el rescate del sector financiero con dinero europeo compute como deuda pública del país. El Gobierno alemán no ha ocultado sus reservas a avanzar hacia esa unión bancaria a la misma velocidad que demandan España e Italia.

Rajoy y Merkel mantuvieron, antes de sus intervenciones en Bucarest, una reunión de 40 minutos para preparar el Consejo Europeo que empieza hoy en Bruselas. Fuentes de Moncloa aseguraron que no se había hablado del posible rescate de España.

«Los acuerdos se alcanzan y se cumplen. Somos una familia política seria, fiable y previsible y no damos bandazos. Y no podemos permitir que nadie lo ponga en duda porque está en juego nuestra credibilidad y el futuro de la unión», afirmó Rajoy durante su alocución en Bucarest.

El presidente francés, François Hollande, aseguró en una entrevista que España debe conocer las «condiciones precisas» para recibir la ayuda europea. También insistió en la necesidad de «dar una perspectiva más allá de la austeridad» y ofrecer un mensaje de esperanza a españoles y portugueses, «que pagan caro los desarreglos cometidos por otros».