Varios miles de personas se sumaron ayer a la manifestación convocada en Oviedo por trabajadores de empresas afectadas por cierres o recortes para exigir que se ponga freno a los despidos. La marcha que partió de la plaza de América y acabó en la Escandalera con la lectura de un manifiesto en el que se exigió al Gobierno del Principado que intervenga para detener los cierres empresariales. La protesta coincidió con el aniversario del despido de 55 trabajadores de la Fábrica de Armas de Trubia.

Los manifestantes lanzaron consignas contra del desahucio del centro social de la Madreña y para demandar el pago de los atrasos del Fondo de Garantía Salarial (Fogasa). La plataforma está formada por trabajadores de compañías como Tenneco, Coca-Cola, Benito Sistemas, Sedes, General Dynamics, Cocinas Asturianas, Palacio de las Nieves y El Urogallo, Lavandería de Cabueñes, Hotel León, Cajastur, subcontratas de Hunosa, Matadero Central, Fábrica de Armas de Oviedo, Fundición Nodular, Cébrano y la Cofradía de Pescadores, así como el sindicato de estudiantes de la Universidad de Oviedo. Marco Antuña, del sindicato CSI, resaltó al final del acto la amplia asistencia y aseguró que "hemos ganado al partido", en alusión a que la marcha coincidió con el encuentro de fútbol entre el Barcelona y el Atlético, en el que se decidió el título de Liga. Israel García, uno de los trabajadores afectados por el cierre de la planta de Coca-Cola en Colloto, denunció que "el Gobierno está despreciando a los trabajadores, no nos quedará otro remedio que luchar". Los manifestantes se citaron para dos nuevas propuesta una el miércoles a favor de La Madreña y otra el viernes para apoyar a los empleados de Sedes.