Asturias es la segunda comunidad autónoma en la que más creció el índice de entrada de pedidos para la industria, con un aumento del 16,2% en el mes de junio respecto al mismo periodo del año pasado. Esta tasa duplica la media nacional (8,2%) y se sitúa sólo por detrás de la de Murcia (33,6%), según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística (INE). Los resultados concuerdan con la percepción de los empresarios en los últimos meses, que ya preveían un incremento de la actividad sobre todo de cara a la segunda mitad del año, acompañada de un ligero repunte en el empleo.
La estadística nacional revela un claro aumento de los pedidos industriales, especialmente en bienes de equipo, con un incremento del 6,5%. Es precisamente en esta rama donde la industria asturiana está cogiendo más brío. Las exportaciones regionales se sostuvieron en los cinco primeros meses del año gracias a las ventas al extranjero de las pequeñas y medianas empresas del metal, motor de la economía regional, que crecieron el 33,4%.
Entre las grandes multinacionales, Arcelor-Mittal, la mayor empresa privada de la región, también cuenta con una poderosa cartera de pedidos que hace prever que las instalaciones fabriles asturianas continúen fabricando prácticamente al máximo de su capacidad en los próximos meses.
Las buenas cifras obtenidas en el mes de junio sirven para moderar la caída que la entrada de pedidos acumuló en la comparativa interanual desde principios de año, y que se eleva hasta el -0,8%. Esto se explica por los retrocesos contabilizados en enero (-2,4%), marzo (-10,9%), abril (-6,5) y mayo (-1,2%).
Sin embargo, si se analiza la variación mensual, las cifras son mucho más favorables. Tras una caída del 7,8% en enero y del 1,2% en febrero, marzo ya ofreció tasas positivas del 1,1%, y en abril se disparó hasta el 18,3% (hay que tener en cuenta el factor calendario, ya que Semana Santa se celebró en marzo en 2013 y este año en abril). Mayo volvió a registrar un descenso del 7,3%, y la recuperación llegó en junio con un alza mensual del 8,6%.
Las cifras que maneja la patronal asturiana del metal también han confirmado la mejoría. Las últimas corresponden al primer trimestre del año, pero ya recogían la creación de 600 empleos y un incremento de la actividad productiva superior al 3%. Sólo en mayo, en las actividades de fabricación de productos metálicos se habían firmado 746 contratos laborales, casi el doble que un año antes y el 11% más que el mes anterior.
Pese a que las estadísticas y las previsiones de los empresarios son favorables, el metal asturiano prefiere no echar las campanas al vuelo. La mejoría procede fundamentalmente del mercado exterior, aunque ya se empieza a detectar cierto movimiento en España. Pero los conflictos que se están produciendo a nivel internacional hacen temer un frenazo al impulso económico nacional y en el conjunto de Europa, principal mercado asturiano.
