ALSA denunció ayer nuevos actos vandálicos contra ocho de sus autobuses al atravesar Oviedo y Gijón. La empresa vincula estos hechos al enfrentamiento con los sindicatos al negarse a readmitir a un trabajador que reconoció haber sustraído gasoil. Los sindicatos aseguraron ayer que el conflicto se debe a los incumplimientos de la compañía sobre el último acuerdo alcanzado en octubre. Ambas partes se reunieron ayer en el Sasec, pero los sindicatos ya habían anunciado antes que mantienen la huelga para el día 12.