Las empresas auxiliares del metal (las que trabajan de forma mayoritaria para multinacionales, sobre todo Arcelor-Mittal) y los sindicatos firmaron ayer una revalorización de las tablas salariales del 0,75% para este año, que beneficiará a unos 2.500 trabajadores. Los representantes de las centrales resaltaron el valor del acuerdo, rubricado en la sede de la patronal Femetal, en un contexto de congelación o de bajada de las nóminas. El portavoz de CC OO, Antonio Lueje, afirmó que "es un alza moderada, pero supone cierta recuperación del poder adquisitivo". Mientras que el responsable de UGT, Javier Campa, resaltó la importancia de este incremento después de que la inflación cerrara el año en negativo (-1%).

Los representantes de las centrales aseguran que esta revisión de las tablas salariales conlleva una cierta estabilidad para el sector. La industria auxiliar está incrementado de forma notable su actividad durante los últimos meses, al calor de la mejora de algunas grandes multinacionales asentadas en el Principado, como Arcelor. El gigante del acero tiene sus dos plantas de la región (la de Avilés y la de Gijón) funcionando a pleno rendimiento y con la cartera repleta de pedidos.

Antonio Lueje destacó que en el sector de las auxiliares "aún existe una gran eventualidad, pero nos encontramos en un buen momento en cuanto a empleo se refiere, dado que nuestra principal área de actividad, la reparación y mantenimiento de las instalaciones, está funcionando bien".

Además, las centrales y la patronal de concesionarios de vehículos y talleres de Asturias (Aspa) se sentarán hoy para iniciar la negociación colectiva para el sector en el que trabajan 3.500 personas.

Por otro lado, la ministra de Empleo, Fátima Báñez, aseguró ayer que los trabajadores ganaron poder adquisitivo en 2014, pues la subida salarial media pactada en convenio fue del 0,57%, mientras que el IPC cerró el año en negativo. "Lo que beneficia a los trabajadores es una inflación controlada y moderada y eso se ha conseguido con reformas", señaló la Ministra en el Congreso en respuesta a las críticas del PSOE sobre la "bajada sustancial" de los salarios en los últimos años.