El Banco Central Europeo (BCE) dejó hoy inalterados los tipos de interés en la zona del euro en el mínimo histórico del 0,05 %, para impulsar la inflación y el crecimiento.

El BCE informó de que el consejo de gobierno, reunido en la sede central de la entidad en Fráncfort, también decidió mantener la tasa de interés de la facilidad marginal de crédito, a la que presta el dinero a un día, en el 0,30 %.

Asimismo la entidad mantuvo la facilidad de depósito, por la que remunera el dinero a los bancos, en el -0,20 %, por lo que penaliza a los que depositen efectivo en el BCE.

Draghi también presentará las nuevas proyecciones macroeconómicas de la entidad, de crecimiento e inflación.

El personal del BCE previó en marzo que la zona del euro crecerá este año un 1,5 %, en 2016 un 1,9 % y en 2017 un 2,1 %.

Asimismo los expertos del BCE pronosticaron en marzo una inflación del 0 % para este año, en 2016 del 1,5 % y en 2017 del 1,8 %.

La inflación en la zona del euro ya subió en mayo tres décimas hasta el 0,3 % interanual, respecto a abril. Los expertos del banco italiano UniCredit descartan cambios significativos respecto a los pronósticos.

En julio y agosto se reducen significativamente tanto las emisiones como la actividad del mercado secundario y de este modo el BCE quiere garantizar que comprará mensualmente bonos públicos y privados por valor de 60.000 millones de euros, como anunció inicialmente.

El BCE ha elevado en 500 millones hasta los 80.700 millones de euros la cantidad de liquidez que los bancos griegos pueden pedir prestada a través del Banco de Grecia, mediante el llamado programa de provisión urgente de liquidez.

El BCE, que decide ahora semanalmente la cantidad que los bancos griegos pueden pedir prestado al Banco de Grecia, tampoco va a aplicar recortes de valor mayores a las garantías que los bancos helenos presentan para recibir la financiación.