Arcelor-Mittal ha abierto el grifo de la inversión en España. La multinacional anunció ayer que gastará 9 millones de euros para que la factoría de Sagunto, en Valencia, pueda producir un acero especial destinado a la industria automovilística. Fuentes de Arcelor-Mittal destacaron que la inversión afecta "indirectamente" a las fábricas de Gijón y Avilés, ya que la nueva línea de acabado de Sagunto se alimentará de acero asturiano.

La multinacional siderúrgica refuerza la planta de Sagunto al mismo tiempo que prepara la ejecución del plan de inversiones previsto para Asturias. Fuentes sindicales destacaron que Arcelor-Mittal ya ha derivado técnicos de la planta de Avilés a la preparación de los trabajos para instalar la nueva máquina de colada de la acería LD-III, que permitiría fabricar nuevos productos. "Los preparativos están en marcha, pero oficialmente la inversión aún no ha sido anunciada", señaló Iñaki Malda, secretario general de UGT en Arcelor-Mittal Avilés.

Malda apuntó que la nueva línea de acabado anunciada ayer para Sagunto forma parte del plan de inversiones en España presentado por la dirección de Arcelor al comité europeo. "Nunca fue una inversión demandada para Asturias porque encaja dentro de las líneas de producción de Sagunto", señaló el dirigente sindical.

Fuentes de Arcelor-Mittal apuntaron que las inversión se realiza en la factoría de Sagunto porque cuenta con una "moderna línea de galvanizado" que ya está enfocada a la industria automovilística del sur de Europa. Los fabricantes de vehículos, que prevén un incremento de producción en los próximos años, demandan nuevos materiales que reduzcan el peso de los automóviles para poder alcanzar los exigentes objetivos en materia de eficiencia energética. "El departamento de I+D ha trabajado en estrecha colaboración con los clientes para desarrollar una gama de productos de acero que puedan dar respuesta a sus necesidades", destacó Brian Aranha, responsable del área de Automóvil de Arcelor-Mittal. Uno de esos nuevos productos es el acero Usibor para estampación en caliente con recubrimiento de aluminio-silicio y la multinacional ha decidido que la fábrica de Sagunto sea la cuarta planta en Europa que produce el nuevo material y la segunda que lo hace en formatos anchos.

Directivos del gigante siderúrgicos anunciaron ayer en Londres que la inversión en Sagunto será de 9 millones de euros, que las obras comenzarán en verano y que la producción se iniciará en el cuarto trimestre de este año. "Este proyecto permitirá a la compañía dar respuesta a la creciente demanda de productos con recubrimientos innovadores destinado al mercado del automóvil en el sur de Europa e indirectamente afecta a las factorías asturianas, que fabricarán el acero que se utilizará en Sagunto", precisaron fuentes de Arcelor-Mittal.

El sector del automóvil es uno de los principales clientes de la compañía siderúrgica. Arcelor tiene en Avilés una línea de galvanizado destinada al automóvil y el pasado año reconvirtió la dedicada a materiales de construcción para destinarla también al sector de los vehículos. En ella, tras invertirse 3 millones, se aplicó el novedoso sistema "zinc-quench", que está a pleno rendimiento aunque desde la empresa se matiza que aún está en pruebas. El "zinc-quench" y el refuerzo de la línea de decapado fueron las últimas inversiones en Avilés y ahora la plantilla está a la espera de una de mayor envergadura: la modernización de la acería LD-III con una nueva máquina de colada continua que permita diversificar la producción de chapa gruesa y alcanzar mayores tamaños. Ya hay personal de la planta de Avilés destinado a preparar los trabajos para desmontar una de las dos viejas máquinas de colada y sustituirla por una nueva. Se prevé que las obras comiencen en junio de 2016. Será necesario parar la producción en las dos líneas durante 10 días y posteriormente durante otros 75 en la que se abordará el cambio. En septiembre comenzaría la producción.