Asturias recibe del Estado 1.828 millones más de los que aporta, lo que convierte al Principado en la sexta región con mayor saldo positivo en términos absolutos, según el informe sobre las balanzas fiscales que ha hecho público hoy el Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas.

Este superávit, con datos de 2012, equivale al 8,40 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB) asturiano y es fruto de la diferencia entre unos ingresos fiscales de 479 millones de euros y un gasto público de 2.307 millones.

En relación a la población del Principado, el superávit fiscal de Asturias es de 1.704 euros por persona.

En comparación con el anterior informe, con datos de 2011, el saldo positivo para Asturias ha subido en 162 millones de euros y en un punto del PIB.

De esta forma, el Principado ha pasado de ser la séptima a la sexta región con mayor saldo positivo.

El informe sobre las balanzas fiscales desvela que Madrid aporta 19.015 millones de euros más de los que recibe, un saldo fiscal negativo que es 2,5 veces superior al de Cataluña, con 7.439 millones de euros, con datos de 2012.

De acuerdo con el estudio, los flujos redistributivos entre las regiones ascendieron en ese año a más de 29.238 millones de euros, casi el 2,8 por ciento del PIB de toda España.

Tras Madrid y Cataluña se sitúa la Comunidad Valenciana con un mayor saldo fiscal negativo, con 1.453 millones de euros, y Baleares, con 1.330.

Estas cuatro comunidades han expresado numerosas veces su desacuerdo con el actual sistema de financiación y reclaman otro distinto.

El resto de comunidades autónomas presentan saldos fiscales positivos, especialmente Andalucía, con 8.531 millones de euros.

Galicia tiene una diferencia positiva de 3.946 millones de euros, seguida de Canarias, con 3.749, y Castilla y León, con 2.933 millones de euros.

El Ministerio señala que para las comunidades receptoras netas -las de saldos fiscales positivo-, los flujos de entrada representan un 5,5 por ciento de su PIB, mientras que para las contribuyentes netas, los flujos de salida eran el 5,6 por ciento del PIB en el año analizado.

Destaca que el saldo fiscal "tiende a empeorar" según aumenta la renta per cápita, de forma que los territorios más ricos generalmente presentan déficit fiscales mientras que los de menor renta suelen disfrutar de superávit.

Según estos datos, cada madrileño tiene un saldo fiscal negativo de casi 3.000 euros y casi mil cada catalán, cifra que se eleva hasta los 1.192 por cada balear y a 284 por cada valenciano.