La asamblea de trabajadores del transporte por carretera aprobó en la madrugada de ayer el preacuerdo alcanzado por los sindicatos UGT y CC OO con las organizaciones patronales CAR, Astra y Asvipymet y que supone una subida salarial agregada del 4,5% en cuatro años (congelación en 2015, 1% en 2016, 1,5% en 2017 y 2% en 2018). La negociación ha desencadenado un enfrentamiento entre las citadas patronales de autocares y autobuses, por un lado, y las de camiones (Asetra y Cesintra), por otro. Estas últimas han denunciado que fueron excluidas de las conversaciones y responsabilizan a CAR y a su principal miembro, el grupo Alsa.

CAR replicó ayer que Asetra y Cesintra rehusaron "voluntariamente" estar en la mesa de negociación y que "nunca se les excluyó", señaló la corporación por medio de un comunicado. Remarcó asimismo que en 2007 la propia Asetra se sentó a negociar el convenio sin contar con las demás patronales. "Las negociaciones se llevan a cabo entre organizaciones y sindicatos, no desde las empresas", añadió CAR en alusión a las críticas recibidas por Alsa.

El gobierno local de Oviedo también ha anunciado que impugnará el convenio al considerar que obliga al Ayuntamiento a asumir un coste de 450.000 euros como pluses de los conductores de los buses urbanos de TUA, un cargo que, en forma de dietas, ahora corre por cuenta de Alsa, empresa concesionaria del servicio.