Los accionistas suizos de la compañía asturiana Rioglass Solar y el presidente y fundador de la sociedad, el empresario mierense José María Villanueva, que controlan conjuntamente el 50% de la empresa a través de la sociedad Rioglass Laminar, expresaron ayer en una comunicación interna su decisión de respaldar y garantizar la continuidad del grupo asturiano, una vez que el gigante andaluz Abengoa, cliente y titular del 50% restante de la empresa, se ha acogido al preconcurso de acreedores.

Los fondos helvéticos VMCap y Partners Group y el presidente de Rioglass Solar y de Rioglass Laminar, José María Villanueva, han planteado a su vez a Abengoa una propuesta para "cambiar la estructura accionarial" de la empresa asturiana, según consta en la comunicación interna, emitida ayer desde Bruselas por el accionista Rioglass Laminar a trabajadores y proveedores, lo que cabe interpretar como la disponibilidad y ofrecimiento de estos inversores a asumir un mayor compromiso inversor y accionarial en el fabricante asturiano de espejos y otros equipos solares ante la crisis por la que atraviesa su socio Abengoa.

En la comunicación, Villanueva informó que "todos los accionistas de Rioglass Laminar, dadas las dificultades del otro accionista, manifiestan su total apoyo a Rioglass Solar" y asegura que "Rioglass Solar tiene una cartera de pedidos muy sólida para 2016, en fuerte progresión respecto a 2015" y que "prácticamente la totalidad" de la misma "corresponde a pedidos de sociedades" ajenas a Abengoa.

La multinacional asturiana Rioglass Solar es propietaria de siete fábricas de espejos y otros equipos para el aprovechamiento de la energía solar en Mieres y Lena (con 104 trabajadores) y en EE UU, Sudáfrica, Israel, Chile y China. El grupo asturiano ha mantenido una gestión diferenciada de Abengoa, aunque este conglomerado posee el 50% de Rioglass, ha sido siempre uno de sus grandes clientes y ha acompañado al grupo asturiano en parte de su expansión internacional.

Abengoa remodeló ayer su cúpula directiva por tercera vez en medio año. El poder ejecutivo se concentrará a partir de ahora en el presidente, José Domínguez Abascal, dos meses después de ser nombrado presidente no ejecutivo. Santiago Seage, hasta ahora consejero delegado, solo desempeñará la labor directiva de Abengoa Yield, la filial de Estados Unidos.

Entre tanto, continuaron ayer los llamamientos políticos a la banca y a otros acreedores para negociar una solución que permita la continuidad de Abengoa, con una deuda de 20.000 millones. El ministro de Economía, Luis de Guindos, cifró la exposición de dinero público a la compañía -a través de préstamos del ICO, Cofides y Cesce- en 415 millones. Y aunque prometió una ayuda "constructiva" por parte del Gobierno, indicó que el apoyo del ICO (Instituto de Crédito Oficial) para salvar la crisis sólo podrá ser "limitado". El Ministro dijo también que el proyecto empresarial de Abengoa es "viable", que necesita un socio industrial y que "lo importante" ahora es conocer su situación contable y su endeudamiento.

Las acciones de Abengoa, que en dos jornadas habían cedido más del 70% en Bolsa, rebotaron ayer el 15,8/% por los movimientos especulativos de algunos inversores. La compañía ha quedado fuera del Ibex 35.