"En una obra con defectos el promotor y el constructor pueden desaparecer, pero detrás siempre estará el arquitecto y el seguro de responsabilidad profesional del colegio", destacó Alfonso Toribio, decano del Colegio de Arquitectos de Asturias. Toribio destacó también que fue la propia agrupación de profesionales la que convenció a los últimos gobiernos del PSOE y PP de que "el futuro del sector de la construcción estaba en la rehabilitación de edificios, no en levantar más viviendas como pedían los promotores".