"Cada vez que un autónomo cierra, Asturias da un paso hacia el abismo". Esta advertencia de carácter apocalíptico la lanzó ayer el presidente de las Asociaciones Federadas de Autónomos de Asturias (AFAS), Héctor Jareño, durante la celebración del "Día del trabajador por cuenta propia". Para evitar que los autoempleados tengan que echar la persiana, los representantes de diversas agrupaciones reivindicaron una serie de medidas comunes a adoptar. Entre ellas, una bajada de impuestos. "Tenemos la mayor presión fiscal de Europa", denunció Jareño. Y la organización reclamó también mayor voz en las negociaciones en las que se deciden cómo gestionar las ayudas e inversiones públicas. Es decir, contar con una silla en la mesa de concertación social.

"No vamos a permitir que nos excluyan", aseguró Jareño, en una alusión a la patronal FADE, que se considera mayoritaria en la representación del colectivo autónomo, al tiempo que cuestiona la representatividad de AFAS. Esta federación promovió recientemente una moción en el Parlamento asturiano con Ciudadanos para pedir una representación propia. La propuesta fue aprobada con los votos de todas las fuerzas políticas, excepto el PSOE. En la concertación se sientan el Gobierno, los sindicatos UGT y CC OO y la FADE.

"Los autónomos no pueden estar representados por una asociación que no tiene la mayoría del colectivo", apuntó. Eso sí, puntualizó que su afán no es sacar a nadie de la mesa. "Hay sitio para todos", señaló Héctor Jareño. Y recordó que el propio presidente regional, el socialista Javier Fernández, se prestó a abrir esta mesa a un mayor número de representantes. "Me cuesta entender este paso atrás, a no ser que se hayan recibido presiones", apuntó.

Igual de dura se mostró la presidenta de la Federación de Trabajadores Autónomos (ATA), Patricia Orena: "Somos considerados como empresarios de segunda", lamentó. Y abogó por un nuevo modelo de pacto social. "No podemos formar parte de ese modelo caduco cuyas reuniones sólo sirven para salir en las fotos", señaló.

En la mesa de las jornadas hubo un representante del Gobierno asturiano, el director general de Innovación y Emprendimiento, Francisco José Delgado, que eludió entrar en el terreno de la representatividad en la concertación social. En lugar de ello, alabó el trabajo de los autónomos asturianos e incidió en la necesidad de adoptar medidas para ayudarlos a abrir nuevos mercados. "Innovar y emprender, que es lo que hacen los autoempleados, son un binomio indisoluble", aseguró.

También participaron representantes de Somos, la marca de Podemos en el Ayuntamiento de Oviedo. La teniente de alcalde, Ana Taboada, y el concejal de Hacienda, Rubén Rosón, anunciaron un plan de ayudas (con una partida de 200.000 euros) para pagar las cuotas de la Seguridad Social de algunos de los autónomos de la capital asturiana.

Por su parte, la presidenta de la Confederación Independiente de Autónomos (Confia), Rosa Suárez, reclamó una mayor claridad en las negociaciones del Acuerdo Transatlántico de Comercio e Inversiones. A lo largo del acto algunos sectores del colectivo autónomo presentaron sus problemas y reclamaciones.

Los agentes comerciales. El presidente de la Asociación de Agentes Comerciales de Gijón (ACG), Ángel Carlos Rato, aseguró que se está perdiendo a gente con talento porque muchos no dan el perfil para poder acogerse a las ayudas dirigidas a los autónomos. "Hay que abogar por que los recursos se utilicen bien", señaló.

El medio rural. El líder de la Asociación Valdesana de Autónomos (AVA), Juan Riesgo, reclamó otro tipo de política para el campo. "No se trata de que nos den ayudas como si fuera limosna, el medio rural debe ser tomado como una oportunidad, en otros países es eje del Estado", explicó.

El diseño gráfico. Una de las principales preocupaciones del colectivo es el poco valor que se da al diseño en las empresas. "Queremos un trato más justo para los profesionales cuando se convoquen los concursos públicos", aseguró el presidente de la Asociación de Diseñadores Gráficos de Asturias (AGA), Marcelino de la Fuente.

La moda. Los modistas también aseguraron sentirse infravalorados. La líder de la Asociación de Diseño y Moda (Adymo), Teresa Laso, reclamó "más ayudas para que los profesionales no abandonen la región".

La madera. La gerente de la Asociación Asturiana de Empresarios Forestales de la Madera y el Mueble (Asmadera), Rebeca Farpón, también pidió más apoyo para el medio rural y alabó el trabajo de los autónomos.

El transporte. Los transportistas asturianos exigieron al Gobierno que elimine ya el "céntimo sanitario". "Estamos pagando el carburante casi cinco céntimos más caro que en Cantabria y Castilla y León", aseguró el presidente de la Unión Independiente de Transportistas Autónomos (UITA), José Fernández. El secretario de la Federación de Transportistas (FDT), Jon Mikel Abellanal, reclamó medidas para evitar el "dumping" (trabajar por debajo del coste) en el sector.