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El euribor, sin fondo

La tasa cae al 0,08% y los expertos no descartan que llegue a estar en negativo El hipotecado medio asturiano ahorra casi cien euros al mes respecto a 2011

El euribor, sin fondo MIKI LÓPEZ

El euribor sigue cuesta abajo y por ahora sin freno. El tipo de interés al que se contrata la mayor parte de las hipotecas en España cerrará noviembre en el 0,08%, un nivel jamás visto. Y según los expertos es probable que prolongue su caída, alentado por la política monetaria del Banco Central Europeo (BCE). Los analistas afirman incluso que podría llegar a adentrarse en terreno negativo, lo que profundizaría aún más el abaratamiento de la cuotas hipotecarias, algo que está sirviendo para aliviar a muchas familias y empresas endeudadas.

Tan pronunciado ha sido el descenso del euribor que alguien con una hipoteca media de las que se firmaban antes de lo peor de la crisis financiera -un crédito de cien mil euros, con un plazo de amortización de 25 años y con un diferencial de un punto- se ahorra casi cien euros por su cuota mensual en relación a 2011. A final de año supone 1.200 euros, el salario medio de un mes de muchos trabajadores. "La caída del euribor está beneficiando a quien está muy endeudado y estimula el ahorro", explica Francisco González, catedrático de Economía Financiera de la Universidad de Oviedo. "La política de expansión monetaria del BCE (tipos de interés ínfimos y compras masivas de títulos de deuda) es un tratamiento para la cura de una enfermedad que tenemos en Europa y está siendo efectivo, por lo que no parece que a medio plazo vaya a haber cambios", señala el docente asturiano. González entiende que no se atisba una posible subida de los tipos de interés, que ahora están en un mínimo histórico (0,05%). La bajada del euribor, explica, está aligerando la losa en forma de deuda que soportan muchas familias y empresas, al igual que la baja prima de riesgo está aligerando los costes financieros asociados a la elevada deuda pública.

El hipotecado tipo de la región pagaba a finales de 2011 una cuota mensual de 476 euros por su préstamo. En aquel momento el euribor cotizaba al 2,044%, casi dos puntos más que este noviembre. Ahora su mensualidad ha menguado hasta los 380 euros. De esos descensos siguen sin poder beneficiarse aquellos que tienen cláusulas suelo en sus contratos, barreras que las entidades financieras pusieron en muchos créditos para, precisamente, protegerse de los vaivenes del euribor. "Son tiempos nuevos, tener los tipos de interés tan bajos, prácticamente a cero, es algo que no habíamos vivido antes y que los economistas no tenemos bien estudiado", reconoce González.

El hecho de que el BCE vaya a mantener, previsiblemente, los tipos de interés por los suelos durante un largo periodo de tiempo responde, a juicio de González, a que aún se perciben bastantes riesgos que pueden poner en peligro la frágil recuperación de la economía en Europa. "Seguimos con un crecimiento económico muy bajo y la inflación no supone ningún riesgo; es una situación diferente a la que se da en Estados Unidos, donde ya se están pensando subir los tipos", apunta.

El organismo que preside Mario Draghi está dando facilidades para que la banca pueda disponer de fondos para prestar. Pero no basta. "El problema no es de oferta, porque hay bastante crédito, es de demanda. No hay proyectos solventes", asegura González.

¿Llegará a entrar en negativo el euribor? "No me atrevo a decir que no lo vayamos a ver, es posible", resalta el catedrático. Para protegerse de este escenario, los bancos han ido subiendo durante los últimos años los diferenciales que aplican a los nuevos hipotecados.

Algunos analistas creen que no a mucho tardar el euribor entrará en negativo. Jaime Díez, de la operadora XTB, asegura que "de las ocho referencias del euribor a distintos plazos, únicamente dos mantienen el tono positivo, la de a nueve meses y la de a un año, pero su rumbo es acabar también por debajo de cero". Lo que seguirá ayudando a que las familias y empresas cuadren sus cuentas. "El desapalancamiento no ha terminado y no hay capacidad para volver a endeudarse", advierte.

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