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La Asturias que innova

Pagar sin tarjeta será la moda

Wetech diseña pulseras, correas de relojes y fundas de móvil equipados con una tecnología que sustituye a los medios de pago de plástico

El protagonista de la novela "Mirando atrás", John West, sufre un trance hipnótico que le hace viajar en el tiempo hasta el Boston posterior al "efecto 2000" y lo que se encuentra es un mundo dominado por las tarjetas de crédito. Una visión futurista, publicada en 1888, que si su autor, Edward Bellamy, hubiera decidido situarla unos cuantos años más tarde podría haber quedado desfasada por culpa de una empresa asturiana. En eso, en enterrar el dinero de plástico, es en lo que trabaja Wetech, asentada en el parque tecnológico de Gijón.

La compañía diseña, fabrica y comercializa productos como pulseras, correas para reloj o fundas para móviles que integran unos chips que permiten abonar compras con tan solo acercarlas a unos centímetros de un terminal de pagos (TPV). Su investigación ha llamado la atención de algunas entidades financieras con las que están ya colaborando de forma activa para promocionar sus productos. Incluso, Wetech acaba de captar nuevos fondos de la Unión Europea (UE) para dar un empujoncito a sus desarrollos.

Los tres socios del proyecto, los doctores en Física Amelia Suárez y Raúl del Coso y el joyero Javier Ardura, están convencidos de que la vida de las tarjetas que engordan las carteras y las monedas y billetes tienen los días contados. Aunque esa no era su idea inicial cuando montaron la compañía. Los dos varones del grupo se conocieron allá por el verano de 2013 al otro lado del Atlántico, en México. En una feria comercial entablaron amistad y se convencieron de unir dos mundos, a primera vista, con poco en común: el de las nuevas tecnologías y el de las joyas. Partieron con ideas como crear pendientes que vibraran cuando entraba una llamada en el móvil o que a través de las pulseras se pudiera responder al teléfono o incluso marcar algún número.

La idea era ingeniosa, reconocen, pero el problema llegó a la hora de intentar la venta. Los comerciales se quejaban de que tardaban demasiado en explicar a los potenciales clientes las funciones de las pulseras o joyas. Al final, acababan comercializándose mejor por su aspecto que por lo que se podía llegar a hacer con ellas. "Lo difícil es vender, hay ideas que son muy buenas pero que no salen del cajón", asegura Javier Ardura.

Aun así no cejaron en su empeño y decidieron dar un giro a sus diseños. "Descubrimos el mundo de los pagos bancarios y desde ahí hemos despegado notablemente", señala Ardura. Su socia Amelia Suárez asiente y asegura que "para nosotros migrar era fácil, porque para ambos proyectos usamos una tecnología similar, lo difícil era entrar en el sistema de proveedores del sector bancario". Pero consiguieron derribar ese muro a base de acuerdos comerciales y alianzas tecnológicas. El golpe definitivo lo dieron tras firmar un acuerdo comercial con el gigante Valid, una compañía que cotiza en la Bolsa de Brasil y que es uno de los mayores productores mundiales de chips para tarjetas bancarias y telefonía móvil. Eso les dio un salto de calidad y les permitió llegar a más clientes. Las puertas de un buen número de entidades financieras comenzaron a abrirse. Wetech ya trabaja con algunos bancos en la fase piloto para que sus productos puedan ser probados con clientes reales y ver cómo los reciben, los valoran y, lo que es más importante, si los usan.

"Lo nuestro es un sistema de pago en el que se trata directamente con el banco, sin intermediarios tipo "paypal" o "applepay", sistemas que las entidades financieras ven como competencia", apunta Amelia Suárez. Para conseguirlo utilizan un tipo de tecnología de comunicación sin contacto, conocida por el termino inglés "contacless".

Pero la idea de Wetech no es que sus pulseras, correas de relojes o fundas de móviles sean solo el sustitutivo de las tradicionales tarjetas de crédito, sino también del resto de plásticos que ocupan espacio en las carteras. Así, sus diseños pueden funcionar también como carnés para el gimnasios, tarjetas de transporte o, por ejemplo, las que los supermercados dan a sus clientes para acumular descuentos. Quieren hacer un todo en uno.

Sus ideas les han valido ser seleccionados para participar en varias ferias internacionales en las que se trata de mostrar cómo serán los pagos en el futuro. Uno de los socios, Raúl del Coso, está estos días en un evento sobre nuevas tecnologías en pleno desierto estadounidense, en Las Vegas, para promocionar sus productos junto a gigantes del sector de las tarjetas de crédito.

Sus desarrollos les han servido para lograr financiación de una iniciativa de la Unión Europea (UE) dirigida a compañías altamente innovadoras, el llamado programa horizonte 2020.

El futuro de esta nueva forma de pagos es muy halagüeño. Se estima que este incipiente sector llegará a mover mil millones de euros en el horizonte de 2022. Las dos grandes compañías del sector, Visa y Mastercard, ya están adaptando sus terminales de punto de venta para que todos puedan aceptar pagos sin contacto de aquí a cinco años. Una ola en la que Wetech quiere ser protagonista.

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