Asturias cerró el pasado año con la inflación en negativo (-0,2%), al igual que ocurrió en 2014 (-1,1%), según datos del Instituto Nacional de Estadística.

En tasa interanual, destacan en Asturias las caídas de los precios asociados a los gastos de la vivienda (energía, agua y otros) y los del uso del coche, que descendieron el 2,8% y el 2,3% respectivamente, por el efecto del descenso de los precios energéticos ligados al petróleo. En cambio, se encareció la enseñanza (1,9%), así como los alimentos y bebidas no alcohólicas, ambos el 1,5%.

En el conjunto del país, el IPC cerró 2015 en cero al subir tres décimas en diciembre en tasa interanual, impulsado por la menor caída de los precios de los carburantes. Así, en diciembre, la inflación se situó en una tasa interanual plana, y consigue romper con la tendencia bajista que registró en los últimos cuatro meses, al tiempo que supone una cifra de cierre de año histórica ya que se produce por primera vez desde que en 1961 comenzara a difundirse la serie de este indicador.

La Fundación de Cajas de Ahorros (Funcas) pronosticó ayer que el IPC volverá a ser negativo en enero. La CEOE vinculó la baja inflación al petróleo y los sindicatos y organizaciones de autónomos atribuye la situación de los precios al crudo y a "la escasa actividad económica".