"Yo creo que no pasa", bromeaba ayer un vecino apostado en el muelle de Ribadeo para seguir de cerca la última maniobra del "Stril Mar" en la ría del Eo y, especialmente, su paso bajo el puente de Los Santos. Este buque de apoyo a plataformas petrolíferas, construido por Astilleros Gondán para el armador noruego Simon Møkster Shipping, abandonó ayer el puerto de Figueras con rumbo a Gijón, donde afrontará su última fase de pruebas.

La operación de salida de este nuevo gigante de Gondán, con 92 metros de eslora y 20 de manga, generó mucho interés entre los vecinos. "Me gusta mucho verlos marchar, impresiona cuando pasan por debajo del puente", comentó María Cruz Jardón. Aunque no es el buque de más tamaño fabricado en el astillero, para salir del estuario fue necesario retirar las antenas y elementos de más altura para evitar problemas. La embarcación hará pruebas en Gijón hasta el día 24, cuando emprenderá el viaje a Noruega.

Entre las particularidades del buque, con diseño de Rolls Royce Marine, está un sistema de lucha contra incendios que permite lanzar 7.200 m3/h de agua hasta 120 metros de distancia. Además, tiene más capacidad que su gemelo, el "Stril Luna", para operar bajo condiciones meteorológicas adversas. Es el último encargo que hasta la fecha afronta Gondán vinculado al negocio del crudo, ya que la crisis del sector petrolífero ha anulado la contratación de nuevos buques y obligado al astillero asturiano a buscar otros mercados.