La ingeniería gijonesa TSK cerró el pasado ejercicio con unas ventas aproximadas de 760 millones de euros, el 20% más que en el ejercicio precedente, y su beneficio bruto (antes de impuestos) se situará en el entorno de los 80 millones, según las estimaciones de la empresa, a la espera de que finalice la auditoría de las cuentas.

De confirmarse finalmente estos datos, TSK, el grupo que preside Sabino García Vallina, encadenará un ejercicio más de crecimiento. En la última década aumentó más de 10 veces su facturación y en los últimos tiempos la acrecentó a tasas anuales superiores al 25%.

El grupo ha concentrado sus esfuerzos en los últimos años en el diseño y construcción, mediante la fórmula de "llave en mano", de plantas de generación de energías renovables, lo que le ha permitido eludir en buena medida el impacto negativo a causa del fuerte recorte de las inversiones que se está produciendo en los sectores del petróleo y del gas a causa de la intensa caída de la cotización de los hidrocarburos desde el verano de 2014. Según datos del sector, el año pasado se cancelaron proyectos petroleros por un importe de 350.000 millones de dólares por ausencia de expectativas de rentabilidad con el actual nivel de precios del barril de crudo. La cotización del petróleo de tipo Brent, de referencia en Europa, se hundió desde los 115 dólares el barril en junio de 2014 a los 27,88 el mes pasado. Ayer se situó en 36,89 dólares. La delicada situación del petróleo por la debilidad de sus precios está causando problemas a algunas grandes ingenierías y a otros proveedores del sector del crudo.

La compañía gijonesa había pronosticado a mediados de 2015 que completaría un buen ejercicio, con una cartera de obra pendiente de ejecutar que, con datos del primer trimestre, superaba los 1.200 millones de euros y una contratación que el pasado diciembre la empresa gijonesa cuantificó en una cifra récord superior a 1.290 millones de euros, el 76% más que en 2014.

La compañía, cuyo consejero delegado es Joaquín García Rico, se adjudicó en 2015 algunos de los proyectos solares más importantes del planeta, entre ellos una planta fotovoltaica en Dubai de 260 megavatios de potencia, un complejo solar en Kuwait compuesto por una planta termosolar de 50 megavatios y una planta fotovoltaica de 10 megavatios, la mayor planta solar de Jordania (120 megavatios), así como un central geotérmica en México de 25 megavatios, entre otros contratos. Recientemente puso en marcha sendas plantas de generación en Marruecos (solar) y en Mozambique (gas natural) y próximamente inaugurará el proyecto de Bockpoort (Sudáfrica), una central termosolar con tecnología de espejos parabólicos y con una potencia de 50 megavatios.

TSK mantiene conversaciones con Isolux Corsan para la adquisición de su ingeniería argentina Tecna, participada por su matriz en el 75% y especializada en plantas de petróleo y gas en la modalidad de llave en mano.