El asturiano José María Álvarez era, al cierre de esta edición, el favorito para suceder a Cándido Méndez al frente de UGT. El secretario general del sindicato en Cataluña cosechó 308 avales -de los 600 delegados- que esperaba que se tradujeran en los votos necesarios para ser nombrado nuevo líder ugetista. El secretario general de la Federación de Servicios para la Movilidad y el Consumo, Miguel Ángel Cilleros, cosechó 251 avales y el tercer aspirante, el líder de UGT-Canarias, Gustavo Santana, no pudo presentar su candidatura al no conseguir alcanzar el 25% de los avales necesarios. A media noche, aún no se había celebrado la votación definitiva.

José María Álvarez, nacido hace 59 años en Alvariza, una aldea de una veintena de casas del concejo de Belmonte de Miranda, se trasladó a vivir a Barcelona cuando tenía 18 años para trabajar en la empresa Maquinista Terrestre y Marítima (actualmente Alstom) y allí inició su carrera sindical en UGT, que le ha llevado a las puertas de encabezar el sindicato en España.

Su candidatura la presentó en la tarde de ayer en un acto multitudinario -con los delegados que le apoyaban- tras haber intentado "consensuar" una lista única con Miguel Ángel Cilleros. En un comunicado, la Federación de Servicios Públicos (FSP-UGT) aseguró que Álvarez lo intentó "hasta el último minuto", pero "la presentación a mediodía de la candidatura liderada por Cilleros malogró alcanzar un acuerdo para una candidatura de consenso". Cilleros incluía en su equipo a dos miembros de la Comisión Ejecutiva de Cándido Méndez, su "número dos", el secretario de Acción Sindical Toni Ferrer, y la secretaria de Salud Laboral y Medio Ambiente, Marisa Rufino, por lo que estaba consideraba como una lista "más oficialista".

Por su parte, en la candidatura de José María Álvarez figura como vicepresidenta Cristina Antoñanzas, actual secretaria general de UGT La Rioja. El nuevo secretario de Organización sería Rafael Espartero, actual responsable de Organización en UGT-FSP.

A media moche de ayer aún estaba pendiente de celebración un último turno de palabras de los dos candidatos antes de proceder a la votación definitiva del 42º. Congreso de UGT.