El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, prometió ayer al nuevo líder de UGT, el asturiano José María Álvarez, que, de formar Gobierno, sus prioridades en materia laboral serán "más empleo y recuperar derechos". Sánchez visitó a Álvarez en la sede de UGT tras la elección de éste el sábado como secretario general del sindicato. En su primera reunión con un responsable político desde su proclamación como sucesor de Cándido Méndez, el sindicalista asturiano reclamó al dirigente socialista "un cambio de políticas" y apeló "a la mayoría de izquierdas que hay en el Congreso para que se ponga a cambiar leyes, con independencia de si están de acuerdo a hacer un gobierno u otro". Sánchez ya había dialogado el mismo sábado con Álvarez para felicitarlo.