La magistrada del Juzgado de primera instancia número 2 de Oviedo ha desestimado la demanda contra el derecho al honor que había presentado Eduardo Donaire, secretario general de MCA-UGT en Asturias, y su mujer contra el sindicalista de la Corriente Sindical de Izquierdas (CSI) Cándido González Carnero, la editorial Letras Atlánticas y un periodista a raíz de unas declaraciones de González Carnero en las que se aludía al alto nivel de vida de Donaire (con el uso de un coche de lujo y la posesión de un piso en primera línea de la playa de Gijón) y en las que le acusaba de "no tener escrúpulos", de ser un "impostor" en las negociaciones de los expedientes de regulación de empleo y de favorecer el cierre de Suzuki en Gijón.

La magistrada destaca en su sentencia que Donaire es una persona "notoria y con proyección pública" y afirma que González Carnero "critica la forma en la que el demandante ejerce su labor sindical" con opiniones en las que "no aparecen expresiones inequívocamente injuriosas y ni se emplean términos ultrajantes ni ofensivos". La juez considera acreditado el uso de vehículos de alta gama por parte de los dirigentes de MCA-UGT de Asturias y que Donaire es propietario, con su mujer, de una segunda vivienda en primera línea de playa en Gijón.