Las empresas, especialmente las más grandes, manejan cada día ingentes cantidades de datos, cientos de informes, miles de cifras y multitud de métricas que llegan desde las fuentes más diversas. Una compañía gijonesa, Mediasquare, trabaja desde hace años para darle forma a todos esos números, poner en la tierra muchos de los que circulan por internet y ordenárselos a los equipos directivos, sobre todo a los del área de marketing, en sus tabletas o teléfonos móviles para que, al final, puedan acceder a ellos por la vía más rápida, tomen decisiones de una forma más instantánea y vendan más.

Sacan el máximo jugo al llamado "big data" (el manejo de grandes cantidades de datos). Los rebuscan y extraen. Son unos mineros de los números. La idea la tuvo Sergio Maldonado, un joven emprendedor que reparte su tiempo entre Gijón y Nueva York. Fue hace cuatro años, mientras trabajaba en otra compañía que él mismo había fundado, Divisadero. "Hacíamos muchos informes con analíticas de datos para bancos y aseguradoras, sobre todo, en las que manejábamos grandes cantidades de información, pero muchos datos pasaban desapercibidos", asegura. Las cifras se organizaban, pero quedaban en agua de borrajas. Ahora han creado una aplicación digital, bautizada como Sweetspot, donde combinan todos los datos de manera más organizada y accesible, para ayudar al directivo a tomar decisiones. "Todo el desarrollo está hecho en Gijón, es 'made in Asturias'", presume el emprendedor.

La globalización ha provocado que este proceso de recogida y análisis de información tenga que hacerse cada vez más rápido. Las gráficas que elabora la empresa gijonesa, y que suelen canalizar el torrente de datos que analiza, también pueden incluir comentarios e ideas de qué hacer para convertir esos números en nuevos proyectos y, finalmente, en más negocio. Los directivos pueden interactuar también a través de esta plataforma. De hecho, entre sus objetivos está también el de facilitar el trabajo en equipo y la comunicación entre los distintos departamentos o el de evaluar el impacto de una marca entre los clientes.

Sergio Maldonado decidió darle una vuelta de tuerca al sector del "big data" convencido de que podría tener un gran éxito en los mercados internacionales. Ahora, evalúan, por ejemplo, el impacto que la marca tiene en las redes sociales de todo el mundo, dónde flojea o dónde está fuerte su popularidad. Y comenzaron por lo grande. Uno de sus primeros clientes fue Protect and Gamble, un gigante del mercado de la higiene personal. Con cada nuevo proyecto, la situación comienza de una forma similar. "Accedemos a toda la información de marketing y a los activos digitales. En el caso de estas grandes compañías tenemos que conseguir indagar en las redes sociales que tienen activas en lugares como Rusia y China y que aquí no existen", asegura Maldonado. A los datos se les da sentido y el directivo puede conocer de forma inmediata el impacto de su negocio y el número de usuarios de sus medios digitales.

Con ese primer gran contrato consiguieron que su popularidad creciera como la espuma y que entraran en su accionariado dos grupos inversores, Inveready y Cube Investments, ambos centrados en apoyar a compañías tecnológicas. Ahora en su nómina de clientes figuran algunas grandes marcas, y de sectores y actividades muy diversas, como Toyota, Danone, Philips, Shell, Tyson Foods o el equipo de fútbol americano Green Bay Packers.

Una vez asentados, quieren dar un paso más. Están explorando las posibilidades que su modelo de negocio podría tener en algunos nuevos dispositivos como, por ejemplo, los llamados relojes inteligentes.

Tanto han crecido que abrieron recientemente una delegación comercial al otro lado del charco, en Nueva York, donde pasa bastante tiempo el propio Sergio Maldonado. También ha habido el camino inverso: han captado talento en Estados Unidos que está trabajando en su oficina gijonesa. Han conseguido un equipo multidisciplinar y también multicultural. Además de estadounidenses, también comparten trabajo europeos e indios.

"Los planes de la compañía son continuar creciendo a buen ritmo", señala Maldonado. Su plantilla está formada por veinticinco personas, todas jóvenes, y en su gran mayoría informáticos. Pero la intención, señala, es seguir contratando. "El problema que tenemos es encontrar jóvenes", asegura. La cantera flojea en la Universidad. "Ahora hay menos estudiantes y los que están haciendo informática ya salen, en su mayoría, con trabajo", destaca el emprendedor. Aun así, no cejan en su empeño. "Nosotros lo que queremos es seguir creciendo en Asturias", resalta.