El servicio de estudios BBVA Research prevé que España cierre el año 2016 con un déficit público del 3,9% del PIB, por encima del nuevo objetivo del 3,6% planteado por el Gobierno en funciones en el programa de estabilidad que aún está pendiente de aprobación por parte de Bruselas. Para 2017, su previsión apunta al 2,9% del PIB, en línea con el pronóstico oficial.

Así se recoge en el último informe "Situación España", presentado ayer, en el que se achaca la desviación en la senda de ajuste en 2015, -del 4,2% del PIB previsto al 5%- al efecto de la reforma fiscal y el adelanto a julio de ese año de la rebaja del IRPF.

Para 2016, el servicio de estudios de BBVA espera que la política fiscal "cambie de signo" y que, si en 2015 fue "claramente expansiva", este año el tono sea "neutral". De este modo, la corrección del déficit este año se debería a la mayor actividad económica y al aumento de las bases imponibles. En este contexto, y dado que su previsión es que la economía crezca en un 2,7% durante los próximos dos años, "no haría falta posponer más de un año la consecución de los objetivos de déficit", indicó el economista jefe de Economías Desarrolladas de BBVA Research, Rafael Doménech.