La estrategia de promoción económica que el Principado se ha comprometido a desplegar dentro del acuerdo de concertación social mira hacia los empresarios y profesionales de la diáspora asturiana. El reciente pacto entre el Gobierno, la patronal FADE y los sindicatos UGT y CC OO enuncia como objetivos intentar captar inversiones o talento a través del contacto con los emigrantes y el posible retorno de algunos de ellos, si bien otras propuestas más concretas que iban en una dirección semejante no han sido aceptadas por la Administración.
El llamado Acuerdo para la Competitividad Económica y la Sostenibilidad Social incluye dos puntos relacionados con los asturianos o descendientes de asturianos que están fuera de la región.
Los empresarios. El documento habla de "utilizar y fomentar la conexión con empresarios asturianos en el exterior para fomentar la inversión en Asturias en nuevos proyectos empresariales que atraigan talento". En otras palabras, el Principado quiere intensificar la relación con empresarios y directivos empresariales establecidos en otras regiones y países con la aspiración de atraer proyectos o de abrir oportunidades de negocio en el exterior para el tejido productivo regional.
El compromiso del Principado enlaza con el trabajo que la Federación Asturiana de Empresarios (FADE) ha desarrollado desde 2005 para establecer contacto con personas de origen asturiano que tienen posiciones destacadas en el mundo de la empresa de América Latina. Esa labor, impulsada por FADE principalmente durante la presidencia de Severino García Vigón, condujo a la creación de asociaciones de empresarios con raíces asturianas en Argentina, Brasil, Chile, México, Panamá, Puerto Rico, República Dominicana y Uruguay. La relación se amplió el pasado año con una asociación en Perú.
La dirección de FADE respalda ahora la apuesta por reforzar los lazos y hacer "lobby" con los empresarios asturianos de la diáspora, aunque su director general, Alberto González, previene: "El vínculo personal con Asturias es un factor que puede ayudar en las decisiones empresariales, pero lo realmente decisivo es que la región resulte atractiva para la inversión y que sus productos sean competitivos".
Los tecnólogos. El contenido de la concertación social compromete al Gobierno asturiano a "poner en marcha un plan de retorno del talento" para incentivar la contratación de investigadores y tecnólogos que ahora trabajan en universidades u otros centros del extranjero. Se establecerán bonificaciones que aún están por precisar para que algunos de esos investigadores puedan ser fichados por empresas o centros tecnológicos asturianos.
Esta iniciativa se queda a medio camino de las propuestas que llevó la FADE a la mesa de negociación. La organización que preside Pedro Luis Fernández propuso que las ayudas al retorno de talento se extendieran también al fichaje por empresas asturianas de profesionales directivos y otros especialistas que pudieran enriquecer el funcionamiento de pymes de la región con la experiencia y conocimientos adquiridos en el exterior, a menudo trabajando para compañías multinacionales. Finalmente, y ante los reparos del Gobierno regional, el acuerdo se limitó al compromiso de crear y difundir un sistema on-line de intercambio de información entre las empresas que demandan profesionales con alta capacitación y los asturianos que con ese perfil han emigrado de Asturias. Es una labor que en parte ya realizan el Instituto de Desarrollo Económico del Principado (Idepa) y, desde la sociedad civil, la organización Compromiso XXI.
