Las ventas de los pequeños comercios asturianos subieron con cierta fuerza en abril. Lo hicieron un 5,9%, según los datos que maneja el Instituto Nacional de Estadística (INE), aunque esa mejoría del negocio no se está traduciendo, por el momento, en nuevas contrataciones. El personal ocupado tan solo creció un 0,4%, el peor dato del país, donde la recuperación está siendo también tímida, pero avanza a un paso más suelto que el asturiano.

En el conjunto de España las ventas de este sector crecieron un 6,4%, cinco décimas más que en el Principado, mientras que el empleo se alzó un 1,5% casi un punto más que en tierras asturianas. La actividad del sector minoristas encadena, de esta forma, 20 meses consecutivos de mejoría. El alza de abril, de hecho, es el segundo mayor desde septiembre de 2002, y solo lo supera el que se anotó el pasado febrero (del 7,3%).

Eliminados los efectos estacionales y de calendario, la facturación del comercio minorista aumentó un 4,1% en tasa interanual, una décima menos que en marzo.

Lo que no acaba de repuntar del todo es el empleo, que aunque crece, lo hace con el freno de mano puesto y a un ritmo muchísimo menor del que lo están haciendo ya las ventas. El Banco de España constató recientemente que la economía española está creciendo ya con cierta intensidad gracias, precisamente, a que las familias están consumiendo más, lo que, aguas abajo, como demuestran las estadísticas, se está traduciendo en una buena mejoría de las ventas de los comerciante. Aunque, eso sí, el regulador también puntualiza que la mejora del PIB se está moderando.