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Mandos de Arcelor se movilizan porque hay obreros que cobran más que ellos

El personal fuera de convenio advierte a la multinacional que los ingenieros "descontentos" supervisarán las inversiones previstas

Mandos de Arcelor se movilizan porque hay obreros que cobran más que ellos

Los jefes de turno, mandos intermedios y oficinistas de Arcelor-Mittal aseguran sentirse "discriminados" por la empresa y auguran una escalada de protestas y movilizaciones si la multinacional no atiende a sus reclamaciones. Este colectivo formado por un millar de trabajadores critica que viene sufriendo recortes en sus derechos laborales y en su nómina durante los últimos años. El último agravio, señalan, fue cuando la multinacional decidió congelarles este ejercicio la parte fija de su nómina (tienen otra variable), mientras que se la subía al resto de trabajadores el 0,5%. Esta situación, denunció ayer el responsable de la Asociación de Personal de Contrato Individual de Arcelor (Aciaa), José Manuel Díaz, está dando lugar a se abran "brechas" entre jefes, que tienen contratos individuales negociados directamente con la empresa, y sus subordinados, que están acogidos al convenio colectivo de la compañía.

"Un ingeniero de reciente incorporación percibe un salario de 800 euros al mes (en su parte fija), mientras que alguno de los obreros que tiene a su cargo recibe ya de primeras unos 1.200", critica Díaz. Sin embargo, los mandos intermedios tiene una parte de la nómina variable para complementar esa cifra aunque el sindicalista advierte que esa parte del suelo depende directamente de la valoración de un superior con unos criterios que tilda de "totalmente subjetivos y que muchas veces depende de cómo te lleves con él".

Las horas extras

El descontento es creciente y Díaz advierte a la dirección de Arcelor-Mittal de que esos "disgustados" ingenieros son lo que velarán por las buena marcha de la ampliación de la acería de Avilés, del tren de carril y de la reconstrucción de las baterías de coque de Gijón. El sindicalista también destacó que este colectivo tampoco cobra horas extra, una retribución que sí tienen el resto de obreros, y que los sistemas de promoción interna son "bastante opacos".

De momento, este grupo de empleados ha convocado una primera protesta que tendrá lugar mañana viernes a la entrada de la factoría de Trasona, en Avilés. La cita será a partir de la una y media de la tarde. No es la única medida de protesta que tienen en marcha. Desde el 13 de junio están cumpliendo su horario laboral a rajatabla, y no como hasta ahora que eran bastante laxos con la hora de salida, y están dejando sin recoger las bandejas en los comedores de Avilés y Gijón con medida simbólica. Díaz advirtió que la conflictividad puede ir en aumento.

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