La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

ANÁLISIS

Más viejos y más endeudados: peligro

Las advertencias del FMI sobre la economía española

La combinación de canas y deudas es explosiva. Lo advierte el Fondo Monetario Internacional (FMI) en su último informe mirando a la cada vez más anciana Europa. España está en riesgo porque más del 18% de su población supera los 65 años y su deuda pública sigue subiendo: 1.088.738 millones de euros según los últimos datos del Banco de España, rozando el 100% del PIB. Las Administraciones deben tanto como lo que se produce en el país en un año y si se pone el foco sobre las empresas y familias la tasa es del 169% del PIB.

Por si el Gobierno de España no se da por aludido, el FMI apunta con el dedo al país. Destaca que sus problemas demográficos y de endeudamiento sólo son comparables a los de Portugal, Grecia e Italia. La periferia del Sur de Europa, en el mismo saco.

La institución dirigida por Christine Lagarde advierte de que España se perfila, entre las economías de occidente, como el país que en 2035 contará con un porcentaje más elevado de trabajadores mayores de 55 años y el segundo, después de Alemania, en número de jubilados por ocupado. El envejecimiento de la fuerza laboral irá acompañado de un declive de la población en edad óptima para trabajar y, según las predicciones del FMI, esa situación se traducirá en una pérdida de innovación y productividad. Un problema grave si se tiene en cuenta que España no destaca, precisamente, por esos ratios.

El Fondo destaca que el incremento de pensionistas presionará al alza sobre el gasto social, lo que puede ser letal para países con una abultada deuda pública como España, que tiene una escasa capacidad de maniobra y que ya está tirando del fondo de reserva para poder cumplir con los pagos de las pensiones. Si se recorta en prestaciones, los jubilados tendrán que gastar más en su retiro, lo que a su vez mermará la capacidad para invertir, un círculo vicioso del que será difícil salir.

Si a todos esos factores se añade la posibilidad de la persistencia de crecimientos bajos en toda Europa -un peligro que se refuerza ante el incremento de las incertidumbres que genera el "Brexit", la oleada de populismo, la escalada del terrorismo o el miedo a una nueva crisis bancaria con epicentro en Italia- España y el resto de países periféricos sufrirán un incremento de la prima de riesgo, con los que los intereses de la deuda del Estado español crecerán y su cuantía podría dispararse otro 5% entre 2017 y 2021, según las proyecciones de la institución.

Para revertir esa situación las medidas que propone el FMI son las de siempre: asegurar que los salarios marchan en línea con la competitividad, cerrar la brecha entre los costes de despido de los trabajadores fijos y los temporales; mejorar la formación; suprimir obstáculos para el crecimiento de las empresas; apoyar la internacionalización de las pymes y facilitar el desendeudamiento empresarial. Las mismas recetas para unos desafíos que crecen, aunque el Gobierno en funciones no quiera mirar más allá del actual crecimiento de la economía del 3%.

Compartir el artículo

stats