Pensiones, educación, mercado laboral... La lista de reformas pendientes para el país es aún extensa, a juicio de Javier Vega de Seoane Azpilicueta, presidente del Círculo de Empresarios (un "think tank" con cuarenta años de vida). El empresario, presidente de DKV Seguros, nació en San Sebastián, pero pasó la mayor parte de su juventud en Asturias. Ingeniero de Minas de formación, hace unos días participó en unas jornadas en Oviedo organizadas por la Asociación para el Progreso de la Dirección (APD) para hablar sobre la competitividad de la economía española.
-En los rankings de competitividad España no suele salir bien parada.
-En el ranking mundial estamos en la posición número 35, cuando somos la decimocuarta economía del mundo. Deberíamos estar mejor posicionados, al menos entre los veinte mejores; para eso hay que hacer una serie de reformas.
-¿Como cuáles?
-La educación, por ejemplo, es el problema más importante de España. Tenemos un sistema educativo mediocre.
-¿Qué se puede hacer?
-Un tema tan importante como éste necesita de un gran pacto de Estado. Habría que introducir competencia en el sistema educativo y más transparencia. Los empresarios deberíamos estar más involucrados en los centros educativos.
-¿Y por qué no lo están?
-La academia, en general, ha tenido cierta endogamia. He sido miembro del Consejo Social de la Universidad Complutense durante diez años y mi experiencia personal es que cuando daba mi opinión los académicos me decían: "Tú no sabes de esto". No se valora la opinión del que viene de fuera porque piensan que ellos son los que saben de todo.
-¿Hay que potenciar la Formación Profesional?
-En España sólo el 20% de los ocupados tiene estudios de FP. Mientras que en Alemania, Suiza o Austria, el porcentaje llega al 60%. Su FP es dual, y hay una buena integración del sistema educativo con las empresas. Aquí a esa formación se le da poco prestigio. Los padres queremos que nuestros hijos tengan una carrera. En esos países los centros de enseñanza de FP tienen el mismo prestigio que los universitarios.
-En Asturias algunos sectores están tratando de volver a esa FP dual.
-Teníamos tradición de escuelas de oficio, pero se perdió y es importante recuperarla. Esta arrancando, pero despacín.
-¿Habrá Gobierno pronto en España?
-Gobierno lo vamos a tener, tarde o temprano. Pero, además, hace falta un pacto de legislatura para hacer reformas. Son muy importantes y ahora tenemos una buenísima oportunidad porque, al no tener nadie mayoría, serán necesarios acuerdos entre las fuerzas principales, y si se produjeran darían mucha estabilidad. Deberíamos inspirarnos en el espíritu de la Transición, buscando el interés general y dejando a un lado estas posturas cainitas por las que la energía de los políticos y ciudadanos se usa en peleas sectarias.
-¿Este parón está afectando a las empresas?
-Inercialmente la economía ha seguido creciendo y generando empleo. Pero esto se está ralentizando y la incertidumbre política frena inversiones. Hemos modelizado el impacto que supone la incertidumbre sobre el crecimiento, y lo ciframos entre 0,4 y 0,7% del PIB, de mantenerse esta situación. Esto podría llegar a afectar a 130.000 empleos. Por eso les pedimos a los políticos que se pongan las pilas.
-Ahora otra amenaza es la salida del Reino Unido de la UE.
-Eso es malo para la Unión Europea, pero peor para el Reino Unido. Es un buen ejemplo para que los catalanes vean cómo les podría afectar una decisión así; no se puede andar haciendo tonterías. Pero siempre que hay problemas hay oportunidades. Por ejemplo, el tema de Gibraltar se podría reconducir y podríamos atraer algunas instituciones comunitarias que están en Londres y la sede de algunas corporaciones internacionales.
-¿Qué hacer con las pensiones?
-Venimos avisando de este problema desde hace años, pero ahora el lobo ya está aquí. La expresión más clara de esto es que la hucha de las pensiones se acabará en dos años. El sistema es insostenible, es como una pirámide de Ponzi (en alusión a una estafa piramidal). Si fuera privado, meterían en la cárcel al que lo montó. Proponemos hacer una reforma de fondo, complementando el sistema con un fondo privado. Así, habría un fondo obligatorio y otro voluntario con incentivos fiscales.
-¿Es hora de subir los salarios?
-España no puede tener una estrategia competitiva a base de salarios bajos. Pero esto no lo podemos cambiar de la noche a la mañana. Los salarios bajos son un problema, pero peor es el desempleo. Tenemos que administrar ese desarrollo estratégico con cuidado y sin frivolidad.
-¿Asturias también sale de la crisis?
-Tiene que despertar un poquito. Ésta es una región donde se mantienen las rentas gracias a las jubilaciones, pero la producción no está creciendo, la población cae y ése es un problema serio. La gente joven aquí no encuentra futuro, ni trabajo. Sin embargo, tenemos una posición logística muy buena, el peso de la industria es más elevado que en el resto de España y hay grandes empresas tractoras. Tendríamos que hacer los deberes en términos fiscales para hacer de Asturias un lugar más atractivo para invertir.
