La campaña turística de este verano va camino de marcar cifras históricas en Asturias y en el conjunto de España, incluidas las de su reflejo en el mercado laboral. Ayer se conoció que en julio el paro descendió en la región en 3.370 personas, la mayor caída registrada en ese mes en dieciséis años (desde 2000), y que la creación de empleo, casi todo temporal, colocó al Principado entre las comunidades con un mayor aumento relativo de las afiliaciones a la Seguridad Social, una posición que rara vez ocupa en otras épocas del año. También se supo que el resultado nacional (83.993 desempleados menos) fue el mejor observado en un mes de julio desde 1997.

Los datos sobre parados y cotizantes conocidos ayer dejan ver que la mayor parte de la "España verde" (Asturias, Galicia, Cantabria y País Vasco) está bien enganchada al auge turístico que vive el país, favorecido por la mejora de la economía y por el deterioro de otros destinos internacionales afectados por atentados terroristas. Cantabria, Galicia y Asturias registraron, junto a Baleares, los aumentos más intensos de la afiliación a la Seguridad Social respecto a junio. El resultado asturiano (1,26%) casi triplica la media nacional (0,48%) y equivale a un incremento de 4.428 empleos que eleva el número de cotizantes a 357.254.

Esa generación de trabajo propició un retroceso también vigoroso del número de parados. Fue del 4,04% respecto a junio y el tercero mayor de España, por detrás de los que presentan las vecinas Cantabria y Galicia, donde, como en Asturias, las contrataciones estivales despegan sobre todo en julio, más tardíamente que en los destinos turísticos del Mediterráneo. Julio redujo la cola del paro asturiano a 80.083 personas, cifras que son las menores desde 2011 pero aún de una dimensión escandalosa, cercana a las de toda la población de Avilés. Los números de España, con 3.683.061 desempleados, son los más bajos desde agosto de 2009, aunque semejantes por su parte a la suma de todos los habitantes de Galicia y Asturias.

Los mayores descensos en el número de parados en Asturias se produjeron entre quienes demandan trabajo en restaurantes, bares y negocios de alojamiento; también en el comercio. No obstante, la mejora fue generalizada en todos los sectores. El paro bajó en la industria y en la construcción, si bien el resultado de esta última (376 parados menos, el 4,17%) obedece en parte a un desplazamiento de la demanda hacia ocupaciones de los servicios, donde las expectativas de hallar empleo son mejores. Los indicadores estadísticos y la opinión de los empresarios señalan que la edificación y la obra pública mantienen un tono muy modesto.

En consonancia con el carácter estacional de la mayor parte de las ofertas de trabajo, la inmensa mayoría de los contratos formalizados en julio (92,59%) fueron temporales. Por cada contrato indefinido (2.057) se firmaron dieciséis eventuales. Y fue de nuevo muy relevante el empleo a tiempo parcial. Los contratos de jornada reducida, mayoritariamente para mujeres y casi todos en el sector servicios, supusieron el 39% del total. Parte de sus destinatarios fueron menores de 25 años, que estuvieron entre los principales beneficiarios de la caída del paro. Entre ellos, el desempleo descendió casi el 7% en este julio que dio un respiro, siquiera temporal, a miles de asturianos que estaban sin trabajo.