Los empleados de Ence, entre ellos los de la fábrica que la papelera tiene en Navia, continuarán con las movilizaciones si la empresa no escucha sus peticiones sobre el caso del trabajador y delegado sindical que fue investigado y expedientado por supuestas faltas de puntualidad y asistencia. Tras señalar que la huelga de tres días consecutivos que finalizó ayer "ha sido un éxito", Javier Rodríguez, presidente del comité de empresa, declaró que, "si no se soluciona este tema, seguiremos presionando y movilizándonos si hace falta".

En la última jornada de huelga, los trabajadores concentrados a las puertas de la fábrica recibieron la visita de representantes políticos y sindicales. Fue el caso del secretario general de CC OO de Asturias, Antonio Pino, que denunció la "persecución sindical que está llevando a cabo la dirección de Ence". También acudieron a Navia la eurodiputada de IU Paloma López, el diputado regional de Podemos Andrés Fernández Vilanova y Juanjo Estrada, secretario de la Federación de Industria de USO.

La empresa negó a través de un comunicado que exista persecución sindical y afirma que la investigación se inició antes de conocerse la candidatura del trabajador a delegado, y que "los medios empleados" (seguimiento con detective y GPS en el coche de empresa) "han sido plenamente respetuosos con la legalidad vigente y se han ceñido exclusivamente a la jornada laboral del trabajador". La papelera afirma que, "de un periodo del tiempo relativamente largo observado, sólo cumplió (el trabajador) con sus obligaciones laborales el 46% del tiempo, dedicando el resto a actividades privadas". El texto de Ence se remata señalando que decidió aplicar una sanción de suspensión de empleo y sueldo de 30 días y no la sanción máxima contemplada para estas faltas, que es el despido. El trabajador alega que por contrato tiene una jornada anual de 1.720 horas, pero flexible, sin hora de entrada y salida.