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JAVIER MÉNDEZ LLERA | Secretario general del Instituto de Analistas Financieros

"Con Trump y con otros populistas como él se vendría abajo el libre comercio"

"Tarde o temprano habrá un nuevo proceso de fusiones bancarias"

Javier Méndez Llera. LAURA CARADUJE

El asturiano Javier Méndez de Llera es desde 2011 secretario general del Instituto Español de Analistas Financieros, organización profesional de la que forman parte 1.500 especialistas en la disciplina del análisis económico, así como ejecutivos y directivos de banca. En esta entrevista aporta su visión sobre algunas de las incertidumbres que están condicionando el comportamiento de los mercados, su lugar de trabajo durante décadas.

-La prima de riesgo española está por debajo de cien puntos y el interés del bono a diez años por debajo del 1%, incluso sin Gobierno...

-El Banco Central Europeo está marcando la tendencia de los tipos con la política de expansión cuantitativa, pero creo que la base de lo que está ocurriendo en Europa está en las expectativas de que los crecimientos de las economías van a ser muy débiles y, sobre todo, de que las inflaciones prácticamente han desaparecido. Incluso estamos viendo deflación en algunos países. Eso hace que con intereses negativos puedas hasta ganar en términos reales. Desde hace unos años, muchos analistas hablan del estancamiento secular, por el impacto de la tecnología o fenómenos como la economía colaborativa, que reduce los márgenes de beneficio en determinados sectores. Todo se ha juntado para decidir que la inflación, entre comillas, ha muerto. Invertir en bonos sigue siendo una apuesta segura en un escenario muy volátil también en lo geopolítico.

-¿Se ha formado una burbuja con los títulos de deuda pública, como sostiene una corriente de expertos?

-Puede haberla. Imaginemos que la Reserva Federal de Estados Unidos, donde hay tasas de paro ya muy bajas, adelanta la subida de tipos de interés. Sabemos que esa decisión se va a producir, la duda es cuándo. En el momento en que se produzca todo ese dinero que ahora está metido en bonos puede salir. Es un riesgo.

-Sobremanera para los países con altos niveles de endeudamiento público y privado, como España.

-El cóctel es muy peligroso. Hay una concentración enorme de inversión en bonos y un posible cambio en la tendencia de los tipos de interés podría ser demoledor. Volveríamos a tener quizás el bono alemán en niveles relativamente estables, pero las primas de riesgo de otro países, como los del Sur, podrían repuntar. Para evitar el peligro haría falta ver un crecimiento con un poco de inflación y una mejora en los niveles de deuda de los países que no se está produciendo. Sería fundamental también ir cumpliendo los objetivos de déficit público y, algo muy importante, que los niveles de consumo e inversión empezarán a crecer.

-La política monetaria está en sus límites y la inflación no repunta...

-El margen del BCE es ya pequeño. Hay quien habla ya de que reparta dinero directamente, de la famosa teoría del "helicóptero del dinero" (dar dinero a hogares y empresas sin la intermediación de los bancos). Creo que es peligroso. Cuando los bancos centrales toman decisiones radicales transmiten a los mercados que algo no está funcionando. Hay que seguir en la línea actual y conseguir que los datos permitan ver un crecimiento más evidente, que se rompa la expectativa de deflación tan grande que hay.

-EE UU ha retenido las subidas de tipos ante los riesgos globales. ¿Cuándo las reanudará?

-Los mercados están descontando que será en el último trimestre del año. De momento la decisión se ha parado, y luego vienen las elecciones en EE UU, especialmente sensibles.

-¿Cómo recibirían los mercados una victoria de Donald Trump?

-Sería una malísima noticia. Como decía un artículo reciente en "The Economist", el escenario que estamos viviendo ahora ya no es tanto de izquierda y de derecha, sino, por un lado, una visión económica llamémosla liberal, abierta al comercio; por otro, posiciones de tipo populista y totalmente aislacionistas. Con ellas, todos los acuerdos para liberalizar el comercio y los avances en globalización se vendrían abajo. Mal que bien, la globalización ha traído un período de actividad económica que unos países han gestionado mejor que otros, pero podemos decir que mantener una visión de libre comercio es lo más adecuada. Esto se rompería con Trump y con otros como él.

-El "Brexit" provocó una conmoción inicial. ¿Ha vuelto la calma?

-Siempre he pensado que Reino Unido en realidad ha estado siempre bastante al margen de la Europa unida. Desde el punto de vista formal han estado dentro, pero realmente no ha sido tanto así. El impacto de una salida es muy importante, pero no tendría comparación, por ejemplo, con lo que ocurriría si Francia hiciera un planteamiento similar con la señora Le Pen. Por otra parte, viene ahora período en el que hay que negociar muchas cosas. La presión corporativa desde la City es muy fuerte para que las cosas se hagan bien y ellos no pierdan su alto nivel de actividad. Respecto a los mercados, hubo un impacto inicial muy fuerte, porque no se esperaba el resultado del referéndum. Luego la situación se ha ido estabilizando. Ahora quizá preocupa más si alguien más va a seguir los pasos de Reino Unido, como Holanda.

-¿Qué impacto tiene la situación política española?

-No tener gobierno es un elemento de riesgo, de distorsión muy importante. Ahora hay una sensación de que algún acuerdo se puede ir desarrollando, aunque en todo caso va a ser una legislatura muy complicada. Necesitamos políticos con altura de miras. Por lo demás, la economía española sigue con un gran problema de endeudamiento. Es importante que las empresas y los particulares se vayan desapalancando. En las Administraciones públicas queda mucho que reformar y que cortar...

-¿En qué?

-Sobre todo en lo que los anglosajones llaman la "red tape", la cinta roja, la excesiva burocracia que obstaculiza la actividad. Hay que liberalizar más la economía. No es tanto dar cortes como hacer reformas que permitan una actividad más abierta. Es importante para reducir el paro.

-Bruselas ha perdonado la multa por el exceso de déficit, pero exige nuevos ajustes. ¿El futuro Gobierno tendrá que administrar más sacrificios?

-La teoría es que si seguimos creciendo, los sacrificios no serán tan necesarios. Probablemente vamos a ver más recortes en el sector público empresarial, que seguirá adelgazando. En la medida en que los ingresos impositivos y que el consumo se vaya recuperando, los recortes que puedan quedar serán relativamente puntuales. No creo que haya medidas extraordinarias en casos como la sanidad, donde hemos llegado al límite de lo que políticamente cualquiera de los partidos está dispuesto a admitir.

-¿Y en los tributos?

-Hay que hacer mejor los impuestos. España es un país que no recauda. Hay un mundo de deducciones incomprensible y poco práctico.

-Los tipos de interés están mutilando la rentabilidad de la banca y empujando a recortes de personal y oficinas. ¿Se avecinan nuevas fusiones?

-Tarde o temprano habrá un nuevo proceso de consolidación de entidades. Hay que buscar el momento adecuado y hacer las cosas bien. Asistiremos probablemente también a fusiones transfronterizas dentro de Europa.

-¿Ve a Liberbank como un candidato seguro a participar en esos procesos?

-De una forma o de otra todos los bancos van a estar ahí. Quizás no con integraciones corporativas estrictamente, sino, por ejemplo, fusionando la gestión de parte de los activos.

-¿La situación de la banca italiana es una nueva bomba de relojería en la zona euro?

-El problema de los italianos es que quieren dar una solución interna, cuando ya tenemos un mecanismo único de reestructuración en Europa. Sería muy negativo que Italia ahora no lo utilizara. Crearía un grave problema de credibilidad que los mercados no entenderían.

-¿Hacia dónde camina la Bolsa este año entre tanta incertidumbre?

-La Bolsa está muy presionada por la situación del sector bancario. Si no existieran estas dudas por los tipos negativos y su impacto en las cuentas del sector, el mercado tendría un recorrido muchísimo mejor. Cuando la expectativa sobre los bancos mejore, y yo creo que lo hará, podremos esperar una Bolsa razonablemente alcista de aquí a final de año.

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