Asturias es la región que más ha reducido sus emisiones de gases de efecto invernadero desde 1990, año de referencia en la lucha contra el cambio climático. Entre 1990 y 2014 el recorte de emisiones en toneladas equivalentes a CO2 en Asturias fue del 14%, vinculado principalmente al cierre de las centrales de carbón más contaminantes y a la medidas para reducir los vertidos a la atmósfera.

Según los datos que maneja el Ministerio de Agricultura y organismos como el Observatorio de la Sostenibilidad, en el conjunto de España las emisiones de gases de efecto invernadero aumentaron el 15% desde 1990 y sólo cuatro comunidades lograron rebajar las cifras. Fueron País Vasco (-3,1%), Castilla y León (-3,3%), Galicia (-5%) y, sobre todo, Asturias (-14,1%).

El Principado encabeza el recorte pero sigue siendo la comunidad que más toneladas emite por habitante, con un total de 22,8. "Sin duda el importante peso de la producción energética basada en carbón es una de las claves", destaca el último informe sobre cambio climático por comunidades del Observatorio de la Sostenibilidad. Además, respecto al PIB, Asturias también está a la cabeza de emisiones, con 1.100 toneladas por cada millón de euros.

Las investigaciones revelan que son muchas las evidencias de cambio climático en Asturias: incremento medio de la temperatura atmosférica de 0,21ºC por década desde los años 60; incrementos de 0,3ºC por década en la temperatura del mar Cantábrico; incremento de flora alóctona e invasora, o aparición de especies aviares mediterráneas.