Las mujeres asturianas podrán denunciar casos de discriminación salarial en la Inspección de Trabajo de forma totalmente anónima. Esta medida forma parte de las pactadas ayer por el Gobierno del Principado, los sindicatos UGT y CC OO y la patronal FADE con el objetivo de tratar de recortar la abultada brecha salarial que separa las nóminas de los varones y de las féminas en Asturias. Los hombres, según los últimos estudios, ganan de media un 28% más que ellas en Asturias, un porcentaje que los agentes sociales y el Principado aseguran que es muy urgente recortar.

"Son unos datos preocupantes", aseguró el consejero de Presidencia del Principado, Guillermo Martínez, quien señaló que muchas de las causas ya se encuentran plenamente identificadas. "Las mujeres ocupan puestos mayoritariamente en los servicios, de una menor retribución que la industria, en la que abundan los varones", destacó. Y ellas soportan una mayor temporalidad que ellos. En concreto, apuntó que en el Principado una mujer necesita trabajar doce minutos más por hora para conseguir igualar su salario con el de los varones.

El primer paso que se va a dar para poner coto a estas diferencias será la creación de una ventanilla única de denuncias de discriminación fruto de la colaboración entre el Principado y la Inspección de Trabajo. La jefa de la Inspección en Asturias, Adelia García, garantizó que las denuncias que se presenten a través de este servicio, que previsiblemente estará funcionando a principios del próximo año, serán totalmente anónimas. Para garantizar el anonimato se cambiará incluso la forma de trabajar. "Generalmente, las denuncias conllevan la identificación del trabajador, pero en estos casos lo que vamos a hacer es actuar a nivel de empresa y analizar las retribuciones de todos los trabajadores para comprobar si hay diferencias, en qué puestos y de qué tipo", explicó Adelia García.

La intención de la Inspección es que las mujeres pierdan el miedo a denunciar porque son muy pocos los casos planteados, normalmente porque las trabajadoras tienen miedo a posibles represalias. "En lo que va de 2016 no hemos tenido ni una sola denuncia en materia de igualdad", apuntó García.

Otra de las medidas que incluye el pacto firmado entre el Gobierno regional, los sindicatos y FADE -y en el que han participado también varias asociaciones de mujeres y empresarias asturianas- es el de orientar a las jóvenes para que se formen profesionalmente hacia sectores hasta ahora más masculinizados. El objetivo es dar un vuelco a las plantillas de las empresas de la industria y que ellas vayan ganando cada vez más presencia. "Queremos promover la presencia de mujeres en ciclos formativos superiores ligados con los oficios donde se cobran los mayores sueldos", aseguró Guillermo Martínez, aunque reconoció que de este punto concreto tardarán en poder verse los resultados. "Será algo que apreciemos más a medio o largo plazo", señaló.

También se ha encargado a la Universidad de Oviedo un estudio detallado para comprobar en qué oficios y en qué puestos están las mayores diferencias salariales entre sexos en la región.

El portavoz de FADE, Ignacio García, aseguró que es necesario luchar también contra las desigualdades sociales y apuntó que es necesario que los hombres se encarguen de más tareas domésticas. "Hay una serie de factores sociales que están impidiendo que ellas accedan a los puestos de responsabilidad", señaló García.

Los sindicatos, por su parte, valoraron positivamente el acuerdo. La secretaria de Mujer de CC OO, Mapy Artidiello, aseguró que "hemos dado un paso importante en la igualdad". Y añadió que en el pacto de concertación social también se incluyen medidas adicionales para tratar de recortar estas diferencias entre hombres y mujeres. Su homóloga en UGT, Carmen Escandón, comentó que el pacto es "un paso más" para reducir las diferencias económicas entre géneros.