Asturias aprovechará la energía del monte. La Dirección General de Minería y Energía del Principado tramita la instalación de cinco centrales eléctricas de biomasa forestal que en conjunto sumarán una potencia instalada de más de 92 megavatios, casi el doble que la central térmica de carbón de La Pereda. Los promotores de los proyectos -a ubicar en Mieres, Tineo, Salas y Villaviciosa- están a la espera del nuevo marco retributivo a las energías renovables para dar el empujón definitivo a los proyectos.
Según los datos que maneja la Consejería de Desarrollo Rural y Recursos Naturales, de los 10.602 kilómetros cuadrados de suelo de Asturias, la mitad (5.022) son superficie forestal. Los expertos destacan el enorme potencial del monte asturiano de cara a poner en marcha proyectos de aprovechamiento energético. Pese a ello, en 2015 sólo el 2,9% de la electricidad generada en Asturias procedía de la quema de biomasa, según el balance elaborado por la Fundación Asturiana de la Energía (Faen). Fueron 534.156 megavatios hora producidos en centrales con una potencia instalada de 78 megavatios.
Las cifras podrían dispararse si salen adelante los nuevos proyectos para Asturias. "En este momento tenemos en tramitación cinco proyectos de generación eléctrica con biomasa que ascienden a un total de 92,6 megavatios", destacó Isaac Pola, director general de Minería y Energía del Principado, que añadió que los proyectos están en distintas fases de avance de la tramitación administrativa y de evaluación ambiental. "En algunos casos incluso ya tienen autorizaciones administrativas, pero las tienen en suspenso a la espera de obtener un régimen retributivo que les permita obtener un rendimiento razonable y con proyección a futuro", añadió Pola.
El pasado martes, el ministro de Energía, Álvaro Nadal, anunció una nueva subasta de renovables de 3.000 megavatios que se celebrará en el primer semestre de 2017 y que no tendrá cupos por tecnologías a diferencia de la celebrada a principios de año, en la que 500 megavatios se destinaron a eólica y 200 a biomasa.
A la anterior subasta se presentó sin éxito la empresa estatal Hunosa , que ya entonces estaba tramitando su proyecto de central eléctrica de biomasa de 15 megavatios para el polígono de la Reicastro, en Mieres. Es una de la cinco instalaciones que están en rampa de lanzamiento en Asturias y a la espera de un empujón en las condiciones retributivas de la energía. "Los otros cuatro proyectos se ubican en el área Salas-Tineo y en Villaviciosa y están promovidos por empresarios del sector forestal", afirmó Isaac Pola, que destacó la importancia de tener la materia prima en el entorno de la central eléctrica para reducir los costes de transporte.
La empresa gallega Renova Generación -perteneciente al grupo García Forestal, primer suministrador de biomasa boscosa de la Península- está detrás de dos de los cinco proyectos de central que se tramitan en Asturias. Son los previstos para La Espina, en Salas, y la Rasa de Selorio, en Villaviciosa.
Con todas esas iniciativas la potencia de generación eléctrica con biomasa forestal instalada en Asturias pasaría de 78 a 170 megavatios y para conocer hasta donde puede crecer el sector el Principado está avaluando los límites a partir de una premisa que destacó Isaac Pola: "cuando hablamos de biomasa forestal casi siempre se nos olvida decir biomasa forestal residual, que no pueda tener un aprovechamiento más noble". El director general de Minería y Energía destacó la importancia de "tener un buen conocimiento del recurso" y en ese sentido señaló que "la Fundación Asturiana de la Energía, el Centro Tecnológico de la Madera (Cetemas) y la dirección general de Política Forestal del Principado están haciendo una evaluación precisa del potencial y capacidad de generación de esa biomasa forestal residual".
De momento Ence acapara la producción con biomasa forestal en Asturias. Dispone de dos plantas en sus instalaciones de Navia. Una de ellas es una planta convencional de generación eléctrica con residuos forestales de 37 megavatios (la segunda de mayor potencia instalada en España después de la que también tiene Ence en Huelva) y la otra es una planta de generación eléctrica de 40 megavatios que aprovecha un subproducto del proceso de fabricación de pasta de papel, el conocido como "licor negro".
"Desde Ence nos gustaría tener la oportunidad de desarrollar aún más la energía renovable con biomasa en Asturias", destacó Jaime Argüelles, director general de Operaciones, Celulosa y Energía del grupo Ence y ex director de la fábrica de Navia, durante una conferencia celebrada el pasado martes en el Real Instituto de Estudios Asturianos (RIDEA). "Con unos precios de la energía entre 110 y 120 euros el megavatio hora, si tienes un buen abastecimiento y se hace una buena gestión industrial y empresarial la generación con biomasa puede ser rentable y de hecho nosotros lo estamos logrando en Asturias", destacó Argüelles.
En las centrales térmicas de carbón de Aboño I, propiedad de EDP-HC, y de La Pereda, propiedad de Hunosa, también se han llevado a cabo pruebas de "co-combustión" de carbón y biomasa, de cara a reducir las emisiones contaminantes, con buenos resultados. Además, al margen de la generación eléctrica, la biomasa cada vez tiene mayor presencia en otros sectores. En 2015, según el balance energético realizado por FAEN, se pusieron en funcionamiento 14 calderas de biomasa en el sector residencial, incrementando la potencia instalada hasta los 48 megavatios, con un crecimiento del 3,7%. Un paso más en el aprovechamiento de la energía del monte asturiano.
