Un alto ejecutivo de Volkswagen ha sido arrestado por las autoridades estadounidenses en relación con el escándalo de los motores diésel trucados de la compañía, informó ayer el periódico "The New York Times".

El diario, que cita a dos fuentes, identificó al detenido como Oliver Schmidt, encargado de la oficina de cumplimiento de las regulaciones de la compañía entre 2014 y marzo de 2015. Schmidt es el primer detenido por el trucaje de los motores diésel que afecta a cerca de 600.000 automóviles en Estados Unidos.

Schmidt fue detenido el pasado sábado en el Estado de Florida y la previsión es que sea procesado en Detroit (Michigan). La portavoz de Volkswagen, Jeannine Ginivan, indicó que su compañía continúa cooperando con el Departamento de Justicia de Estados Unidos.

Volkswagen ha admitido que sus motores diésel de 2 y 3 litros estaban trucados para ocultar sus emisiones de óxidos de nitrógeno, un producto considerado cancerígeno por las autoridades sanitarias.

La compañía alemana ha llegado a un acuerdo para indemnizar en EE UU a los propietarios de los casi 500.000 vehículos con motores diésel de 2 litros vendidos en el país así como a las autoridades estadounidenses. Según el acuerdo, Volkswagen se verá obligado a desembolsar unos 15.000 millones de dólares. La empresa también está cerca de llegar a un acuerdo para compensar a los alrededor de 85.000 propietarios de vehículos con motores diésel de 3 litros que existen en EE UU.

Volkswagen comercializó 5,99 millones de vehículos en todo el mundo al cierre del año pasado, lo que supone una subida del 2,8% en comparación con el ejercicio anterior.