El recibo de la luz de un hogar medio fue el pasado enero 13 euros más caro que en el mismo mes de 2016, según la estimación que ha realizado la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) sobre los efectos de la escalada de precios registrada en el mercado mayorista de la electricidad.

De acuerdo con esas cuentas, la factura media de un hogar con 3,45 kilovatios de potencia contratada y un consumo de electricidad de 2.500 kilovatios/hora al año fue en enero de 61 euros, cinco más que en diciembre (subida del 9%) y 13 más que hace un año (aumento del 27%).

Estas subidas gravan a los consumidores que están acogidos a la tarifa regulada (PVPC), más de 250.000 en Asturias, donde una mayoría de usuarios pertenecen al mercado libre y por tanto no están directamente afectados.

La CNMC también estima que la tarifa regulada fue la opción más barata en 2016 para los consumidores domésticos de electricidad, siendo alrededor de un 5% más económica que cualquiera de las ofertas disponibles en el mercado libre, según indica el regulador en una entrada de su blog.

Las eléctricas siguen pleiteando con el Gobierno sobre la regulación del mercado. El Tribunal Supremo acaba de admitir a trámite un recurso presentado por Iberdrola contra la nueva metodología establecida el pasado noviembre por el Ministerio de Energía para calcular el margen de comercialización que las compañías pueden cargar en la tarifa regulada de la luz. Este recurso se une a los ya presentados por EDP, Viesgo y Gas Natural Fenosa.