El sector asturiano del transporte por carreteras cerró un "buen" 2016, aunque con matices, pero espera un 2017 convulso y lleno de incertidumbres. Así lo aseguró esta mañana el presidente de la patronal regional Asetra, Ovidio de la Roza. Según las cuentas de la asociación estas empresas facturaron 740 millones en el Principado el año pasado, lo que supone un incremento del 3,8%.

Aunque hubo una de cal y otra de arena. Pese a que la actividad está mejorando y el negocio arranca, la rentabilidad de las empresas está con el freno de mano echado. De la Roza explicó que la subida del combustible, especialmente durante los últimos meses del año, y la presión de otros costes provocó que la rentabilidad de las compañías fuera prácticamente nula. "En el mejor de los casos pudo haber mejorado un 0,5%", explicó.

El líder de la patronal advirtió que este año estará lleno de incertidumbres. Entre ellas citó, los problemas que puede plantear tener un gobierno en minoría, la dificultades que habrá para sacar adelante los presupuestos nacionales o las medidas proteccionistas, impulsadas por Trump en Estados Unidos (EE UU), pero que ya están empezando a cruzar el charco.

Aún así, reconoció que el año había comenzado con un fuerte impulso en la región gracias a que compañías como Arcelor-Mittal y Asturiana de Zinc están funcionando al máximo de su capacidad.

Lo que lamentó De la Roza fueron los últimos ataques sufridos por algunos camioneros asturianos en León por transportar carbón de importación. "Es un grave problema de seguridad y de derecho", señaló.