El Consejo de Ministros aprobó ayer un real decreto con la cuantía máxima de 321,61 millones de euros para ayudas estatales al alquiler de viviendas y a la rehabilitación y renovación de viviendas y barrios. Supone una prórroga durante un año del plan 2013-2016, al no haber podido tramitarse un nuevo programa para el período 2017-2020 por haber estado el Gobierno en funciones. El acuerdo de ayer garantiza el reparto del dinero para este año.

Este importe, que es el mismo que se destinó para 2016, se prevé que posibilite la concesión de más de 100.000 ayudas al alquiler y a la rehabilitación o renovación de 35.000 viviendas, lo que supondrá la generación de unos 12.700 puestos de trabajo. Además, a estas ayudas se sumarán 140 millones de euros que aportará el Ministerio de Fomento durante el ejercicio 2017 para las ayudas de subsidiación de préstamos vinculados a la vivienda, de las que se beneficiarán 140.000 familias.

Las ayudas son gestionadas por las comunidades autónomas. Las subvenciones al alquiler se reparten entre arrendatarios que no superen un cierto nivel de ingresos. Como norma general, llegan a ser como mucho equivalentes al 40% de la renta anual y el importe máximo es de 2.400 millones al año. Se conceden por doce meses, prorrogables por sucesivos períodos de la misma duración.